Sin buscarnos

¿Tú quién eres?

Por días Manuel y yo nos turnábamos para estar con Sarah.

Había sido noticia que una mujer fue atacada en mitad de la noche y que la policía aún no había atrapado a los culpable, tratamos de que la identidad de Sarah no saliera a la luz y así evitar un escándalo alrededor de nosotros. Aunque lo que en verdad me importaba era que Sarah despertara.

Pero eso aún no había sucedido, los médicos nos decían que había que esperar a que la inflamación en su cabeza bajara, y eso hacía, esperar. Me sentaba junto a su cuerpo dormido y la cuidaba. Acariciaba su cabello y le hablaba, le leía libros con la esperanza de que despertara pero aun no había ocurrido el milagro.

Los hematomas en su rostro habían cambiado de color en señal de que iban mejorando, los cables al rededor de su cuerpo solo me provocaban ganas de llorar de tanta impotencia, pero no podía perderme en mi dolor, debía ser fuerte por ella.

Además estaba la revista, trataba de no descuidarla pero no podía estar en dos lugares al mismo tiempo y mi cabeza estaba todo el tiempo aquí junto a ella. Manuel y Marion me cubrían en lo que podían y cuando mi presencia era obligatoria Manuel se quedaba en el hospital.

⏤Sarah, por favor despierta, te lo suplico.

A diario le pedía esto pero nunca obtenía respuesta, lamentablemente.

Cada cierto tiempo venían enfermeras, chequeaban los signos vitales de Sarah y se marchaban.

Pero este día algo diferente pasó.

⏤Llama al dr. rápido.

Al escucharles me di cuenta que algo había pasado.

⏤Qué está pasando? ⏤En ese momento entró un médico acompañado de otra enfermera.

⏤Dr. la paciente presenta respuestas motoras. ⏤Al escucharla entendí a que se refería, Sarah estaba moviendo sus dedos.

⏤Va a despertar? ⏤Les pregunté.

⏤Es muy probable que lo haga pronto.

⏤Gracias a Dios. -Tenía ganas de llorar de tanta emoción-

⏤Le pondremos un tratamiento para tratar de estimularla y ver si da otras respuestas.

⏤Si, por favor.

Horas más tarde Sarah emitía más movimientos pero aun no despertaba, cuando le conté a Manuel que Sarah podría despertar él vino a acompañarme.

⏤Mira Manuel, movió otro dedo... y mira, creo que está despertando. ⏤En ese momento una débil Sarah abrió sus ojos. ⏤Amor estas bien? ⏤Traté de hablarle para que supiera que estaba ahí con ella, esperándola como siempre.

⏤Karina iré por el doctor.⏤Manuel salió de la habitación en busca de un médico.

⏤Donde estoy?

⏤Amor estas en el hospital, yo estoy aqui contigo no te preocupes.

⏤No, no entiendo, ¿Qué hago aquí?... ¿Quién eres tú? -Ella me está mirando con algo de miedo, como si en verdad no me conociera y mi corazón se acelera-

⏤¿Como que quién soy?... Sarah, ¿estás hablando en serio?...

En ese momento entraron varios médicos y enfermeras, lo que me impidió seguir hablando con Sarah.

⏤Buenas tardes señorita, soy y el Dr. Hubert. ¿Como se siente?

⏤Siento como si me hubiera pasado el mundo por encima y me duelen mucho los ojos y la cabeza. ⏤Sarah trató de mover uno de sus brazos pero emitió un grito. ⏤También me duele el hombro.