Son recuerdos...

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Karina

Cuando se acercaba la hora de ir a casa no pude evitar volver a preocuparme por Sarah, anoche cuando despertó asustada pensé que simplemente había tenido un mal sueño, pero hoy no estoy segura de nada.

Su comportamiento desde la salida al bar había cambiado mucho, de estar feliz pasó a comportarse perdida y con poco animo, durante el camino a casa se mantuvo callada a pesar de que traté de entablar una conversación con ella.

Y aunque me gustaría darle espacio, mi preocupación era mayor y necesitaba saber que le pasaba.

⏤Sarah, podemos hablar?

⏤Si, por supuesto.

Me senté junto a ella en el sofá y agarré sus manos.

⏤He hecho algo que te molestó?

⏤No, por qué dices eso?

⏤Es que estas extraña, prácticamente no me has hablado y cuando te hablo apenas me has contestado.

⏤No pasa nada, solo me siento un poco cansada.

⏤Estas segura? Sabes que me puedes decir lo que sea, puedes compartir conmigo lo que te atormenta.

Sarah se quedó pensativa un rato antes de responder.

⏤No pasa nada en serio, solo necesito descansar.

⏤Esta bien. ⏤Quise respetar su decisión de no hablar y no insistí, mejor la invité a cenar. ⏤Creo que es hora de cenar, me acompañas?

⏤Si, vamos. ⏤Pero aunque prepararon uno de sus platos favoritos ella apenas comió.

Esa noche, como la noche anterior me despertaron sus gritos y al tratar de despertarla para sacarla de su agonía me atacó como si no me reconociera y trató de salir corriendo de mis brazos.

⏤Nooo.

⏤Sarah soy yo, amor soy yo cálmate. ⏤Encendí la luz y cuando logró verme a los ojos se calmó.

⏤Qué fue lo que pasó?

⏤Estabas soñando y no podías despertar.

Sarah se quedó un momento pensativa como asimilando lo que había pasado.

⏤Quieres un poco de agua? ⏤Le acerqué un vaso y ella lo tomó, luego volvió a recostarse y yo la estuve abrazando y mimando con besos en su cabeza. ⏤Quieres volver a dormir? ⏤Ella afirmó.

Apagué la luz y la mantuve en mis brazos para tratar de que durmiera nuevamente.... Al volver a despertar me volví a encontrar sola y al buscarla la encontré en su habitación.

Esto era como volver a semanas pasadas pero peor.

⏤Amor como te sientes?

⏤Estoy mejor. ⏤A pesar de su respuesta Sarah se veía cansada y con ojeras.

⏤Podemos hablar de lo que pasó?

⏤No. ⏤Su rotundo no me hizo sentir mal, sentía injusto que me aislara de lo que le pasaba.

⏤Pero no podemos seguir así, lo sabes?

⏤Lo siento, sé que debe ser molesto todo esto para ti.

⏤No estoy molestas por Dios, es solo que me duele verte así y no poder ayudarte, me mata. —Sarah en ese momento se echó a llorar. ⏤Lo que sea que te este pasando lo vamos a superar, te lo aseguro. ⏤Le dije mientras le consolaba.

⏤Podría quedarme en casa por hoy?

⏤Si, claro. Yo puedo suspender mis compromisos y quedarme contigo. ⏤Le ofrecí, pero ella me rechazó de nuevo.

Sin buscarnosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora