▪️Capítulo 34

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Al otro día, Wei WuXian apretaba la almohada que abrazaba más fuerte, para después soltarla y estirar sus brazos aún con los ojos cerrados.

No tardó en estar un poco más consciente y con lentitud abrió los ojos, solo para encontrar aquellas paredes blancas que se habían convertido en algo habitual.

No tenía prisa en salir de cama, sabía que Lan Wangji estaría ocupado ya sea en sus empresas o en los negocios.

Con un poco de flojera, busco ropa holgada, antes de irse a duchar.

Un poco más relajado, se seco el cabello y camino piso abajo para ver qué comería.

Tenía antojo de algo dulce, esto causó que su estómago grupera un poco.

Con un puchero camino por los pasillos hasta llegar a la cocina donde una bandeja estaba cubierta.

La destapó, y los ojos por poco se desorbitan, era como si Lan Wangji hubiera prevenido lo que quería.

En ella había unos pastelillos con una taza de chocolate, que solo necesitaba calentarse.

Obviamente tenían quienes lo hicieran, pero a esa era, la señora del servicio de cocina, probablemente había ido de compras para la comida.

Wei WuXian con cuidado lo calentó, tratando de ser cuidadoso, ya que hubo veces en qué se distrajo y las cosas terminaron quemadas, aún así procuraba no crear tantas molestias.

Parecía que todo andaba bien, hasta que escucho como la puerta de la mansión fue abierta, perdiendo la mirada hacia la persona que entraba.

La señora que se encargaba de la cocina entraba con una caja en la mano y una bolsa donde llevaba los alimentos a utilizar en el día para la comida.

Wei WuXian se acercó a la mujer – señora Nu, le ayudo –.

Toma la caja y la bolsa.

La mujer quiso negarse – no se preocupe joven Wei, los guardias me ayudaron en la salida –.

Wei WuXian no hizo tanto caso y dejo las cosas sobre una mesa – ¿Qué trajo? ¿Que vamos a comer hoy? –.

La señora toma la bolsa y fue directo al refrigerador para acomodar las cosas – El joven Lan me encargo entregarle esa caja –.

Wei WuXian de inmediato vio la caja y se acercó – ¿Así? ¿De que se trata? –.

La mujer le respondió con una sonrisa.

Wei WuXian sin aguantar su curiosidad lo abrió.

Dentro de la caja había un traje negro y camisa blanca, junto con una hoja

Wei WuXian realizó un puchero, pues sentía que no estaba de humor para tanta formalidad.

Saco la ropa, dejando a un lado la hojita y lo miro a detalle, era simple, pero bonito.

Una idea se le cruzó por la cabeza, con la forma de dejar la camisa.

Tras una sonrisa de satisfacción, agarro la hoja de un inicio, dejando antes, el traje de forma que no se arrugara.

En la hojita se veía una letra totalmente pulcra y sin ningún margen de error,queriendo casi enmarcarlo por lo bonito que se veía. No era mucho su contenido, algo normal en el destinatario.

Salgamos está tarde y cenemos. 7 en punto.
~ LZ”

Wei WuXian sonrió ladino y susurro – Lan Zhan, Lan Zhan, siempre llegando en el momento oportuno –.

El olor a quemado hizo alarmarse, que de inmediato volteo hacia donde había dejado el chocolate.

La señora Nu realizó la misma acción, y fue la primera en correr de inmediato y apagar el fuego.

¿Cómo que tu esposo es un mafioso? /WangXian (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora