¿Cómo que tu esposo es un mafioso? /WangXian (Omegaverse)

Capítulo 13

Un nuevo día iniciaba y en muchas partes de así empezaban a trabajar.

Jiang Cheng, al levantarse tomo un baño y se vistió con sus ya acostumbrados trajes formales.

Almorzaba un poco y se preparaba para salir.

Tomo sus llaves del auto, casa y su telefono.

Al poco tiempo ya se encontraba en su empresa.

Llegó a su oficina y reviso la presentación y formatos de contrato para la negociación.

El día estuvo tranquilo, fue un éxito la junta aunque larga.

Su día restante se la paso trabajando pero sin comer, se le había olvidado por completo.

En la noche, seguía en la oficina, se distrajo cuando una llamada le llegó – Diga – respondió aún concentrado en sus papeles.

– Shidi, no me digas que sigues trabajando – hablo el contrario.

Al oír de quien se trataba, por fin se separó del teléfono – ¿Que tal te fue Wei WuXian? Espero y no ocacionaras problemas –.

El mayor exclamó sorprendido – Aunque no lo creas, me comporte al inicio –.

Jiang Cheng empezaba a temer lo peor – ¿Que hiciste Wei WuXian? ¿cómo que al inicio? –

– ¡Oh Jiang Cheng! No lo mal intérpretes, en la mañana fue a la inaguración y dimos un paseo por todo el hotel y créeme que todo se ve mejor en persona que en fotografía. Al inagurarse, los interesados y quienes apartaron ya algunos cuartos no tardaron en llegar. Justo me los encontré y me presentaron ante ellos. Después fuimos al restaurante y valla que eran muy amigables, nos llevamos bien, después comenzamos a tomar y está vez por insistencia de ellos. Quisieron competir conmigo y como te imaginarás no me pudieron igualar, terminaron briagos y antes de perder a su totalidad su movilidad, los llevamos a sus habitaciones. La verdad que fue muy emocionante y divertido. Después tuve una charla con el encargado que mandaste y valla que es muy bueno. Y ya ahorita regrese, pero me quedé con hambre, así que compre unos fideos picantes y chile, ya tenía antojo – termino de hablar.

Al decir eso un sorbo se oyó por el teléfono – Wei WuXian, más respeto para tu presidente, deja la comida a un lado –.

Wei WuXian después de unos segundos respondió – No puedo, quise resistirme, pero el color y el olor me llamaban, de verdad que ya lo necesitaba –.

Jiang Cheng solo acariciaba su ceño para intentar relajarse – mañana volverás a hotel antes de venirte y te disculparas con los huéspedes por tu comportamiento, si no lo haces olvídate de regresar, hablaré con el encargado para que me diga si ya lo hiciste o no, ahora colgaré, tengo que terminar el trabajo –.

Wei WuXian con la boca llena hablo – Cheng Cheng, no te vallas tarde, te vas a arrugar y te verás viejo, si eso pasa, ya nadie te querrá para casarse –.

Jiang Cheng del enojo colgó el teléfono.

Desde ese momento no se pudo concentrar, así que apagó todo y salió de la empresa.

Ya no había nadie más que los guardias de vigilancia en turno.

Se despidió de ellos y salió.

Recordó lo que Wei WuXian había dicho sobre que comía y su estómago empezó a rugir del antojo.

Así que fue a comprar a un centro comercial fideos y chile para prepararlo, además de un poco de carne para complementarlo.

Al pasar por el pasillo de verduras, vio algunas, y le parecía que podía convinarlos, así que tomo unas pocas.