Tortura +18 ©JJK

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Cierro el grifo para que el agua dejara de salir y me acerco hasta la toalla para secar mis manos. Miro a mi alrededor para observar de nuevo este cuarto de baño desconocido que pertenecía a Jungkook.

Y se notaba que pertenecía a él porque olía a su perfume por todas partes.

Era bonita esta casa, tenían buen gusto. También vivían en un pueblo alejado de la ciudad, pero aquí no tenían tantos prados como por mi casa, sino que era más como un pequeño monte. Este lugar estaba al lado contrario del lugar donde yo vivía, y se notaba que en invierno incluso se podía llenar todo de nieve con cantidad.

Sería divertido subir en trineo a esas montañas.

La casa era bastante moderna y amplia, además de que había visto que tenía mucho más servicio del que teníamos nosotros, y eso ya era mucho porque en mi casa quizás había unas treinta personas en total para tenerlo todo perfecto siempre.

Me acerco a la puerta para salir hacia la habitación. Apago la luz del baño y veo mientras cerraba esa puerta que Jungkook estaba completamente dormido en la cama. ¿Cómo era posible que muriera de esa manera siempre? Era admirable, y en Jeju siempre hizo lo mismo.

Sino empezamos a meternos mano o con besitos, y él se tumbaba antes de tiempo, entonces se dormía al instante. Ojalá yo tuviera esa capacidad, podía estar horas dando vueltas en la cama sin dormir.

Me acerco a su lado de la cama para apagar la luz de la pequeña lámpara que había en su mesilla de noche; dejando solo la luz de la del otro lado encendida. Le miro mientras apagaba la luz, y me quedo allí mirándole fijamente.

No le había podido agradecer por presentarme a las esposas de sus amigos, me ilusioné tanto y estaba tan emocionada mientras volvíamos a la casa, que sólo hice hablar y hablar sobre lo que me habían contando y de las personas que había conocido.

Y no le dije que se lo agradecía.

Me dio tan fuerte la ansiedad al pensar que seguían pasando cosas malas con gente que no conocía, que casi me echaba a llorar delante de él. ¿Qué le hice yo a esa mujer como para que ahora jugara a humillarme? Yo no la conocía de nada, y se me olvidó preguntarle a alguna de esas mujeres.

Me marché con ellas a una mesa, y me conversaron sobre todos los temas del mundo. Sus hijos eran muy tiernos y buenos, y más tarde llegó la madre de Jungkook con sus amigas y se unió a nuestra mesa. Al final me sentí muy cómoda e incluso algunas mujeres me halagaron por mi vestido y mis accesorios.

Algunas no parecían creerse que yo hubiera imitado a la otra mujer, y Ahyon me dijo que esa mujer que me imitaba nunca había usado algo así.

Se veía sobretodo en cómo me costaba mantenerse en pie con los zapatos tan altos.

Lo único con lo que me quedaba era con que me la pasé bien en una reunión con gente que no conocía, y que hice algunas amigas que fueron amables conmigo.

Y Jungkook había contribuido a ello.

Me acerco a él y agarro las mantas que casi estaban en sus piernas para subirlas y arroparle un poco. Me avergonzaban estas cosas porque Jungkook había hecho cosas muy bonitas por mí hoy, y no sabía cómo agradecerle correctamente.

Nadie hacía cosas así por mí.

Me separo un poco y miro hacia todas partes sintiendo un poco de sed. ¿No había aquí agua? Yo siempre me traía agua a mi habitación en las noches. ¿Podía salir para ir a buscar agua? Jungkook ya estaba dormido para pedírselo a él.

Me giro para ir a la puerta y la abro para salir al pasillo. Tenía una luz tenue que salía de unos pequeños focos en el suelo. Camino suavemente hasta llegar a las escaleras y las bajo dejando en mi mano por la barandilla.