NARRA JUNGKOOK.
Vuelvo a tomar asiento en el suelo, sobre esa alfombra nueva con pelaje de color rosado y con forma de la silueta facial de un oso de peluche, y agarro las instrucciones de la cuna para ver el siguiente paso.Había herramientas por todas partes, al igual que tornillos. En sí la habitación de la bebé estaba casi terminada, pero cuando abrimos la caja de la cuna que habíamos pedido en la tienda, nos dimos cuenta de que no era el modelo que habíamos elegido, por lo que tuvimos que devolverla.
Allí se disculparon al percatarse de que nos habían dado el pedido de otra familia, y tardaron unos días en volver a pedir la nuestra.
Al menos nos regalaron una sillita para el vehículo extra por las molestias.
Después de la millonada que nos estábamos dejando en esa tienda de lujo de cosas de bebé, como para que además nos dieran problemas y no se disculparan como era debido.
Nos dieron la caja, pero por el trabajo no pude unir las piezas para dejarla lista, así que estaba haciéndolo casi dos meses después. Iba a nacer ya el bebé y yo todavía sin hacer esto; aunque en realidad ________________ solo estaba de siete meses y una semana.
Pero ya se sentía muy incómoda y lo mostraba todo el tiempo, sobretodo en las noches cuando se desvelaba para llorar porque no podía dormir bien.
Había habido días que me marchaba al trabajo con sólo una hora habiendo dormido, pero al menos mi padre me dejaba volver antes para dormir. A mí lo que me importaba es que ella durmiera y se alimentara bien, pero estos días lloraba mucho por estar incómoda y ansiosa.
Y yo no sabía que más hacer. Agradecía que mi madre y la suya supieran remedios para calmarla cuando le dolía algo o se ponía nerviosa hasta acabar llorando sin parar.
Aunque a mí me gustaría poder hacer algo yo mismo.
Dejo a un lado las instrucciones para agarrar una de esas patas de acero pintada de blanco para dejarla junto a la parte centrar de la cuna, pero necesitaba buscar el tornillo correcto para unirlas.
— Jungkook... —suelto las cosas poco a poco mientras me giraba levemente para mirar hacia la salida de la habitación en mi espalda.
Veo a _______________ entrar con una mueca cansada.
— ¿No estabas durmiendo? —niega acercándose.
Incluso se veía más pálida de lo normal cuando no dormía o le dolía algo, se le notaba mucho el malestar. Se acerca hasta mí mientras una de sus manos estaba en ese vientre grande, y deja la otra en mi hombro.
— Ayúdame a... bajar —agarro sus brazos mientras intentaba quedar de rodillas— Sí, gracias.
— Ten cuidado con esos tornillos —los aparta con desgana.
En vez de tomar asiento a mi lado, lo hace entre mi piernas mientras echaba a un lado todas las piezas de la cuna. Se agarra a mi camisa con fuerza mientras pegaba su mejilla hacia mi pecho, y suspira. La envuelvo con mis brazos para notar que temblaba y que sorbía por su nariz como si llorara.
— ¿Te encuentras mal? —asiente— ¿Has vomitado?
— N-No... —susurra— No tengo ganas.
— ¿Y qué es lo que te duele?
Llevo mi mano hacia su barriga. Ella deja su mano sobre la mía allí, y realmente se notaba como se movía y pateaba. Menuda furia iba a salir de ahí.
Pero estaba claro que mientras más miedosa se tornaba ______________ por los dolores, más nerviosa se sentía la bebé y peor se comportaba ahí.
— No se está quieta y no me deja dormir —me acerco a su cabeza para besarla con cuidado— Me duele la espalda y la cabeza todo el tiempo... y mis piernas apenas tienen fuerzas.
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Tortura +18 ©JJK
Фанфик"La verdadera tortura era mantener en silencio lo que sentían el uno por el otro" En un mundo donde la rivalidad entre dos familias dedicadas al narcotráfico, apuestas y saqueos, los Jeon y Ryeo, se mantenía constante un odio marcado por la competit...