MARCAS DE GUERRA-PABLO GAVI

5-Es ella

*Lara*

-¿Qué haces cariño?-le pregunté a samu que estaba sentado concentrado en dibujar desde esta mañana.

-Es un dibujo para cuando vea a Gavi, mira-me dijo enseñándome el papel.

Samu solo tenía dos años pero el dibujo se le daba estupendamente para su edad.

Estaba dibujando a dos personas jugando a fútbol, había hecho incluso el detalle de las porterías.

-¿Le gustará?-me preguntó emocionado y yo asentí.

-Seguro que si cielo-le dije acariciando su pelo-creia que cuando me enseñaste el dibujo eramos papá, tu y yo-le dije haciendo referencia al otro dibujo y el negó.

-No mami, papá nunca quiere mis dibujos, ya no dibujaré más para él-me dijo y yo hice una mueca.

-Pero cariño eso no está bien, también tienes que hacerle dibujos a papi-le dije intentando hacerle entrar en razón.

Por mucho que Toni fuese un cabron, no quería que mi hijo sintiese todo ese "odio" hacia su padre, esperaba que cuando creciese Toni dejase de pensar que samu era un estorbo para él y compartiera momentos con él.

-Mami, perdoname, yo siempre te hago caso en todo pero no le hoy a hacer dibujos a papá, él no los quiere-me dijo encogiendose de hombros y no quise insistir más, simplemente asentí dejándole acabar el dibujo.

Cuando revisé mi teléfono me di cuenta que tenía un mensaje de Instagram, hacía años que apenas lo usaba para subir alguna foto de samu en todo caso.

Lo tenía en privado y solo me seguía mi familia y la de toni, ya ninguno de mis amigos tenía relación conmigo y a muchos los tuve que eliminar cuando Toni me lo exigió.

Me metí en el DM, y abrí los ojos al ver de quien era el mensaje que había recibido.

"Me gustaría hablar contigo a solas, sin samu y sin Toni, ¿podría ser posible?"

Jamás esperé un mensaje así de Gavi, solo de recordar las palizas de samu cuando se pensó que podría haber tenido algo con Julián Álvarez hizo que un escalofrio recorriese mi espalda y mis ojos se aguaran.

"No, no me vuelvas a escribir, por favor"

Escribi sin pensar borrando la conversación y el chat, no quería ni imaginar lo que me haría Toni si llegaba a enterarse.

Y justo llegó a casa dejando la mochila del entreno en la entrada, me miró haciéndome un gesto con la cabeza y se subió para arriba sin siquiera saludar a nuestro hijo, que soltó un pequeño suspiro mientras su padre subia las escaleras de casa.

Era pequeño, pero muy inteligente y aunque yo quería creer que no, sabía que se daba cuenta de muchas cosas.

-Esta noche hay una cena con el equipo, van familias y jugadores, a las 21:00 tendremos que estar en el restaurante-me dijo y yo asentí mientras terminaba de poner la mesa.

Él se acercó hasta mi rozandose con mi culo, y me tensé cuando hundió su cabeza en mi cuello.

-Eres tan preciosa...a veces me acuerdo porque me enamoré de ti-me susurró y yo me separé un poco indicándole con la cabeza a nuestro hijo, que no despegaba la mirada de nosotros.

El soltó un suspiro de frustración sentándose en la mesa esperando que yo pusiera la comida.

-¿Te das cuenta que siempre está en medio?-me dijo sin siquiera tener la decencia de bajar la voz.

-Toni, es un niño, es normal-le dije en un susurro y el chasqueó la lengua mientras negaba con la cabeza.

-Le diré a mi madre que se lo quede esta noche, necesitamos tiempo para los dos-me dijo y recé internamente para que mi suegra no pudiese quedárselo, no quería estar a solas con el.