MARCAS DE GUERRA-PABLO GAVI

56-La respuesta es no

*Gavi*

-Él, otra vez estaba aquí papá, ¡quería llevarme con él y alejarme de vosotros!-lloró samu desconsolado en cuanto fui a su habitación.

-Campeón..-Le dije abrazándolo contra mi pecho mientras él lloraba dejando un beso en su frente-Toni no va a hacerte nada, ¿vale? No puede mi vida-le dije y él se separó un poco de mi.

-¿Cómo estás tan seguro?-me preguntó aún entrecortado secándose las lágrimas con la palma de la mano.

-Porque tu ya eres un Páez-le dije haciéndole cosquillas logrando sacarle una risotada-siempre lo has sido bebé, pero ahora no hay nada que nos separe-le dije- soy tu papá y tu mi niño, y no voy a dejar nunca que te hagan nada, bebé-le dije y el asintió con una sonrisa volviendo a abrazarse a mi pecho.

-Gracias papá, te quiero mucho-me dijo en mis brazos y yo llené mi pecho de aire orgulloso de sus palabras.

-Yo te quiero más mi campeón-le dije besando su pelo repetidas veces haciéndole reír-y ahora a descansar, que mañana será otro día-le dije queriéndolo arropar pero el me hizo una mueca nada conforme-¿Qué pasa?

-¿Puedo dormir con vosotros? Solo hoy porfi porfi porfi-me dijo juntando las Palmas de sus manos y yo lo miré expectante.

-Bueeeno...venga vamos-le dije y el aplaudió contento mientras corría hasta nuestra habitación en busca de su madre.

Cuando entramos Lara estaba dándole el pecho a Martina que se había despertado antes por el llanto de samu y el pequeño no tardó en hacerse hueco en la cama cerca de su madre para observar a su hermanita.

-Mami duermo con vosotros papá me ha dejado-le dijo con una sonrisa y Lara me miró haciendo que yo me encogiese de hombros con una sonrisa.

A la mierda nuestra noche fogosa, pensé.

-Muy bien cielo-le dijo ella besando su frente y yo me tumbé también dejando a samu en medio de Lara y mío.

-Es muy guapa Martina-le dijo Samu a Lara y esta asintió.

-Los dos sois muy guapos-le dijo su madre peinando su flequillo y él pequeño sonrió orgulloso de las palabras de su madre.

-Pues si-dije estando de acuerdo-¿sabes una cosa samu? Yo creo que mamá es una fabrica de bebés preciosos-le dije y él soltó una carcajada mientras asentia.

Estuvimos un buen rato tratando de dormir a los niños hasta que por fin los dos se quedaron dormidos, pero para ese entonces más que calentón los dos estábamos deseando dormir también asique fue lo que hicimos.

Al día siguiente cuando me desperté solo estaba Samu en la cama y Martina dormida en su cuna.

Me levanté para ir a buscar a Lara abajo hasta que escuché como se abría el grifo de la ducha de la habitación y sonreí.

Volví a mirar hacia la cama comprobando que los niños estuviesen dormidos y me metí en el baño echando el pestillo.

Lara estaba dándose una ducha y yo me quedé observándola mientras mordía mi labio.

Me fui quitando la ropa hasta quedar desnudo y entre en la ducha tocando sus brazos por detrás haciendo que ella diese un repullo del susto.

-¡Ay, Pablo!-dijo llevándose la mano al pecho asustada.

-Perdón, no quería asustarte-le dije abrazandola dejando un beso casi en su cuello y vi como una sonrisa tornaba sus labios-Qué fría está el agua-le dije y ella rió dándose la vuelta en mi dirección.

Cogió mis mejillas con sus manos dejando un beso en mis labios y yo la pegué a mi cuerpo todo lo que pude disfrutando de sus labios sobre los míos.

Bajé mis besos a su cuello con furor deseando escucharla gemir, y lo conseguí.

Mi mano fue bajando hasta su entrepierna hasta dar con su clitoris y frotarlo como sabia que le gustaba mientras mis labios pasaban de su cuello a sus pechos dejando suaves mordiscos en ellos.

-Pablo...te necesito-gimió en mi oreja entrecortada, y creo que con solo escucharla me hubiese corrido por completo.

-Yo también amor, yo también-gemí desesperado por sentirla.

Alcé una de sus piernas pegando su espalda a la pared de la ducha y llevé mi miembro a su entrada embistiendola de una estocada haciendo que soltase Un pequeño gemido en mi oreja mientras se aferraba a mi espalda.

Mi mano libre se paseaba por todo su cuerpo, y los besos se repartían en el cuerpo del otro de forma desordenada acabando en los labios de cada uno.

Entre y salí de ella con fuerza mientras gemiamos en silencio siendo conscientes de que teníamos dos pequeños en la habitación.

Hasta que llegamos al orgasmo y tuvimos que acallarnos el uno Al otro con un beso mientras nuestras piernas fallaban por la excitacion del momento.

*Lara*

-Te amo-me dijo Pablo besando mi hombros mientras me sonreía a través del espejo y yo sonreí.

-Yo más, mi vida-le dije justo cuando escuchamos a Martina balbucear en la habitación.

Pablo fue a cogerla para que no despertase a samu, que seguía profundo en nuestra cama y yo salí a vestirme mientras el se bajaba con ella en brazos al salón.

Mordí mi labio atenta a la escena hasta que salió de la habitación, pero es que a mi Pablo le quedaba demasiado bien el papel de papá.

Me puse un pijama cómodo porque no teníamos pensado salir de casa y la ropa de calle me era más incómoda para darle el pecho a Martina y bajé abajo donde Pablo ya había colocado a Martina en su hamaca y estaba preparando el desayuno.

-¿Y esto?-le pregunté con una sonrisa viendo que estaba preparando tortitas.

-Para mi niño y mi niña grande-me dijo con una sonrisa y yo sonreí dejando un pico en mis labios.

Me puse a jugar un poco con Martina cuando el teléfono de Pablo volvió a sonar en la mesa, donde podía leerse "papá".

El se giró para mirarlo y al darse cuenta quien era me miró y silencio la llamada resoplando, como solía hacer cada vez que lo llamaban.

Se giró para seguir a lo suyo y yo no pude contenerme.

-Mi amor...-le dije abrazandolo por la espalda y dejando unnbeso en su hombro.

-Sé lo que estás buscando y la respuesta es no-me dijo negando en rotundo.

No quería que el odio lo cegase con su familia, porque sabía que a la larga se podría arrepentir.

-Todo el mundo merece una segunda oportunidad Pablo, y más las personas que te dieron la vida-le dije acariciando su nuca y el cerró los ojos disfrutando del tacto de la yema de mis dedos.

Estuvo varios minutos en silencio y después abrió los ojos en mi dirección.

-¿Cómo puedes ser tan buena?-me dijo y yo me encogi de hombros-la respuesta por ahora es no, y dejemos el tema, porfavor-me pidió dándome Un pico en los labios para zanjar el tema una vez más...

(CONTINUARÁ...)

¡Os leooo!❤️❤️✨️