MARCAS DE GUERRA-PABLO GAVI

16-Los tres

*Lara*

Los labios del sevillano se mezclaban con los míos de una forma tan suave que no quería separarme de ellos nunca.

Las mariposas de mi estómago y el corazón de Pablo que latía acelerado retumbaban en las paredes de la cocina hasta que la falta de aire nos hizo tener que separarnos.

No quería abrir los ojos por vergüenza, me había atrevido a besarle, pero él dejó un último pico en mis labios antes de que yo abriese los ojos.

Nos quedamos mirándonos sin saber muy bien que decir, ¿qué podíamos decir? Si ni siquiera yo sabia porque había sentido la necesidad de besarle.

Y justo cuando parecía que él iba a coger la iniciativa de decir algo, los pasitos de Samu por las escaleras hicieron que nos separaramos un poco.

Gavi me sonrió inocente y yo le devolví la sonrisa nerviosa.

-Buenos dias-canturreó Samu apareciendo y Gavi lo cogió dejando un beso sonoro en su mejilla.

-Muy buenos días campeón, ¿como has dormido?-le preguntó.

-Muy bien-le sonrió mi hijo que miró en mi dirección.

-Buenos días mi príncipe-dije acercándome a ellos para cogerlo, aunque rápidamente él me echó los brazos.

Besé su mejilla mientras Gavi empezaba a hacerle el desayuno, se había tomado la molestia de incluso comprarle a mi hijo moldes con figurillas para cortarle el pan con formitas y a Samu le había encantado.

-¿Qué forma quieres hoy enano?-le pregunto Gavi abriendole el cajón para que él lo eligiera y mi hijo se llevó el dedo a la boca pensando.

-Este-le dijo señalándole el que tenía forma de coche y el sevillano asintió cogiendolo-hoy llueve-dijo mi hijo mirando por la ventana y yo asentí.

-¿No te gusta?-le preguntó el sevillano y Samu negó.

-Y a mami tampoco-dijo.

-Pues entonces es la excusa perfecta para no salir de casa, esta tarde peli y mantita-le ofreció Gavi y mi hijo asintió emocionado.

-¿Peli de superheroes?-le preguntó y yo reí.

-De lo que tu quieras enano-le dijo cogiendolo con un brazo para sentarlo en la silla y ponerle su desayuno.

                              *******

-¡Qué chulada!-dijo Samu al ver como habíamos preparado Pablo y yo el salón para ver la peli.

La verdad es que nos había quedado súper chulo, con el sofá súper abierto y un montón de cogines para hacerlo acogedor.

La película que había escogido Samu ya estaba preparada solo para darle al play.

-¿Estás listo?-le preguntó Gavi sentándose en el sofá.

-Listísimo-dijo Samu corriendo hacia el para sentarse en sus piernas contento.

Gavi me hizo una señal para que me sentase a su lado y le hice caso acurrucándome en su hombro mientras él dejaba un beso en mi pelo.

Apenas le presté atención a la película si os digo la verdad.

Pablo me hacía sentir tantas cosas que no sabía expresarlo con palabras.

Como trataba a mi hijo, como se había volcado en ayudarnos y ese beso...que me había hecho sentirme tan diferente.

¿Habría sentido él lo mismo? Era la pregunta que rondaba mi cabeza justo cuando él decidió pasar su brazo por detrás de cintura buscando mi mano para entrelazarla con la suya, y ahí volví a sentir eso tan especial que crecía en mi interior.

Busqué su mirada con mis ojos y me encontré con los suyos mirándome de la misma forma, y no me quedaron más dudas, él estaba sintiendo lo mismo que yo.

Acabamos de ver la peli y Samu escogió la siguiente mientras Pablo se la ponía.

Mientras la veíamos volví a apoyarme en su hombro y él dejaba caricias sobre mi mano con cariño.

Samu acabó quedándose dormido sobre Gavi y yo paré la película.

-Voy a subirlo para que se quede en la cama-le dije al sevillano.

-Te lo subo yo-me dijo cogiendo a samu con cuidado acunándolo sobre su pecho y mi hijo no tardó en abrazarse a él.

Subimos a dejar a Samu sobre la cama y salimos de la habitación quedándonos en el pasillo sin saber muy bien que decirnos.

Pero solo fueron unos segundos, los segundos que tardó el sevillano en juntar de nuevo nuestros labios acariciando mi cintura y pegándome a su cuerpo con sus manos en mi cintura.

Seguí su beso con ganas pasando mis brazos por su cuello y de un salto y con su ayuda me subí encima de él sin dejar de besarnos.

-¿Quieres ir a mi habitación?-me preguntó entre besos y yo asentí en sus labios.

No dejamos de besarnos en ningún momento desde que entramos en la habitación.

Se sentó en el filo de la cama conmigo encima y bajó sus besos hasta mi cuello haciendo que yo echase la cabeza para atrás para dejarle más acceso.

Llevé mis manos al filo de su camiseta para quitársela con su ayuda y él me quitó la mía dándonos la vuelta para dejarme tumbada sobre el colchón.

Se detuvo a mirar mi cuerpo que desgraciadamente estaba aún lleno de moratones y me sentí bastante avergonzada.

Lo notó cuando me cubrí con mis brazos pero él me los quitó empezando a dejar caricias y besos en cada marca.

-Nunca más-me susurró volviendo a mis labios y yo enredé mis dedos en su pelo enfatizando el beso.

Puedo decir que fue el mejor sexo de mi vida.

Gavi me hizo el amor con tanta pasión, delicadeza y cariño que jamás había sentido nada igual.

No dejó ni un rincón de mi cuerpo sin explorar y dejó besos y caricias en cada golpe que tenía llenándome de fuerza.

Cuando abrazamos nos quedamos uno frente al otro, aún desnudos solo tapándonos con las sábanas de su cama y mirándonos con los ojos brillosos.

-¿Y ahora qué?-le pregunté confusa, Acabábamos de complicar aún más las cosas.

Él llenó su pecho de aire y de un movimiento me pegó más a su cuerpo para pasar un mechón de mi flequillo por detrás de mi oreja.

-Ahora no puedo vivir sin vosotros-me dijo y yo sonreí de forma efímera.

-Siento que voy a complicarte la vida-le confesé tras unos segundos en silencio y él buscó mi mano para entrelazarla con la suya.

-Mientras siga llenándome el pecho de felicidad como ahora mismo, complicamela todo lo que quieras-me dijo y yo sonreí mirándolo de la misma forma en la que él me miraba a mi-¿Tú te arrepientes?-me preguntó.

-No-le admití.

-Entonces es lo único que me importa-me dijo acariciando mi espalda con cariño-nunca más vas a estar sola, ni tú ni samu, ahora somos los tres-me dijo y yo asentí.

-Los tres-repetí y el asintió buscando mis labios con una sonrisa...

(CONTINUARÁ...)

Siento haberos tenido sin capi tantos días, pero es que no he parado ni para respirar.

Voy a ponerme ahora otra vez a escribir hasta que me dé sueño, aunque no creo que tarde mucho.

Mañana actualizo la de pedri, y creo que voy a pasar a actualizar una por día y hacer los capis un poco más largos para compensar porque actualizar las dos todos los días con el poco tiempo que tengo ahora mismo es imposible❤️.

Aún así espero que os haya gustado el capi.

Disfrutad los momentos así, porque a estos dos les tienen que pasar tanta cosas aún...

¡Os leo!❤️✨️