MARCAS DE GUERRA-PABLO GAVI

64-Lo siento

*Lara*

Me estaba siendo imposible controlar a samu en las gradas del campo, y eso que aún ni había empezado el calentamiento. Corría de aquí para allá sin parar emocionado, siempre le gustaba venir a ver a Gavi y menos mal que había venido con Aurora y su novio porque sino me hubiese sido imposible controlarlo.

-Mamá, ¿podemos bajar a desearle suerte a papá?-me preguntó mi pequeño y yo sonreí, no pasaba sin su padre.

-Si claro-le dije levantándome mientras el daba unos saltitos aplaudiendo-¿Nos Bajamos a Martina?-Le pregunté y el asintió.

Le pedí a Aurora que me dejase a Martina para bajar a ver a Gavi y ellos dijeron que nos esperarían arriba.

Me pegué a mi hija al pecho mientras cogía la mano de Samu para no perderlo, había demasiada gente aquí. Nos metimos dentro del túnel de vestuario para buscar a Gavi...y no lo encontré, pero si a pedri, ferran y fermin.

Había hablado poco con ellos y eran los mejores amigos de mi novio, asique saludé a los tres por educación.

-¿Podemos ver a Martina?-me preguntó pedri y yo asentí despegandola de mi cuando mi hijo soltó un grito que nos asustó a todos.

-¡PAPÁ!-Dijo corriendo hasta Pablo que salía ya vestido del vestuario y corriendo lo cogió al vuelo llenándolo de besos.

-¿Y está sorpresa, campeón?-le dijo a nuestro hijo y el sonrio abrazándose al cuello de su padre.

-Quería verte antes de jugar, como tu hiciste conmigo el otro día-Le dijo y Pablo le sonrió con emoción dejando un beso en su mejilla mientras se acercaba a mi.

Dejó un beso en mis labios y otro en la mejilla de Martina que miraba a todos los lados con atención.

-Es guapísima-nos dijo ferran a mi y a Pablo y ambos le sonreímos.

-Es igual que Gavi-rió pedri acariciando la mejilla de la pequeña-Hola pequeñina-le dijo pedri con voz dulce.

-La verdad que los dos son muy guapos- dijo fermin y Samu le sonrió acostandose en el pecho de su padre.

-¿Mi hermana?-me pregunto Pablo.

-Arriba, pero es que Samu quería bajar a desearte suerte antes de empezar-le dije.

-Ah....que ha sido cosa de mi niño entonces-le dijo al pequeño que sonrio orgulloso-Eres lo que más quiero enano-le dijo besando su cabeza.

-Yo también, papá-le dijo Samu con todo su cariño.

Sabía que a Gavi esas palabras le importaban más que a nada en el mundo, y más cuando me había dejado ver lo que le podría afectar perder a samu...o perdernos a nosotros el otro día.

Aún recordaba sus lágrimas y el alma me quemaba, él no merecía pensar que nosotros le abandonariamos.

Cuando sus entrenadores fueron saliendo él bajó a Samu de sus brazos.

-Venga cariño, tenemos que subir ya-le dije a samu ofreciéndole mi mano y él la cogió.

-Mucha suerte papá-le dijo Samu y Gavi le sonrió viviendo hasta mi.

-Mucha suerte, amor-le dije justo cuando él se acercó a dejar un pico en mis labios.

-La suerte la tengo en la grada, os amo-me dijo guiñándome un ojo para después dejar un beso en la mejilla de Martina y salir corriendo detrás de sus compañeros.

No podía estar más agradecida a la vida por ponerme en mi camino a un hombre como él.

Con mi mejor sonrisa volví a las gradas con mis cuñados y a los pocos minutos los chicos ya salieron al campo a calentar.