MARCAS DE GUERRA-PABLO GAVI

23-Te quiero

*Gavi*

"Mierda todo",pensé.

Volví a entrar en la habitación para estrechar de nuevo el cuerpo de lara sobre mi pecho mientras dejaba caricias en su pelo.

-Cariño, no pasa nada, no te lo va a quitar-le dije y ella me miró con miedo.

-Si me lo quita me muero-repetía en sollozos y yo negué.

-Solo quiere saber donde está, Alberto me ha dicho que como su padre tiene derecho a visitarlo cuando quieras, asique vamos a dar mi dirección y ya, no pasa nada rubia-le dije secando sus lágrimas.

-¿Tú dirección?-me preguntó y yo asentí a la vez que ella negaba-te voy a meter en problemas Pablo, justo eso es lo que no quiero después de lo bien que te has portado con nos...-la corté con un beso en sus labios intentando que se relajase.

Fundi mis labios por los suyos por varios segundos, hasta que sentí que sus nervios se calmaron un poco y por ende también los míos.

-Me importa un rábano meterme en ese tipo de problemas, Samu y tu no estáis solos y ya es hora de que ese imbecil lo sepa, jamás voy a dejarte sola-le dije acariciando su mejilla.

Ella no respondió, pero volvió a juntar nuestros labios agarrando mis mejillas con pasión, y al separarnos nos quedamos mirándonos a los ojos por unos instantes.

-Te quiero Pablo, te quiero por querernos de esta forma-me dijo y sentí que el corazón se me salía del pecho al escuchar su te quiero por primera vez.

Sonreí como un bobo mirándola y agarré su cintura pegándola a mi cuerpo dándole otro beso.

-Yo también te quiero rubia, os quiero a los dos más que a nada en el mundo-le dije encima de sus labios.

Los besos empezaron a ser más húmedos, a subir de tono tanto que Lara me tumbó en la cama y justo cuando yo llevaba las manos al borde de su camiseta para quitarla una pequeña vocecita nos interrumpió desde el salón.

-Papiiiiii-gritó Samu y Lara y yo nos separamos a regañadientes.

-Voy ya campeón-le grité de vuelta justo antes de dejar un último beso en los labios de su madre que acabó en morder su labio inferior y tirar un poco de él-no sigas llorando, duchate y después bajas con nosotros, ¿Vale?-le pedí y ella asintió mucho más tranquila.

Bajé las escaleras encontrándome con Samu ya con toda su mesa lista para que nos pusiésemos a pintar y eso hice.

Mientras él hacia el dibujo de lo que parecía el fondo de un mar yo decidí intentar dibujar una familia de tres dentro de un corazón enorme.

-Es muy bonito, somos mamá, tu y yo-me preguntó acercándose a mi y yo asentí sentándolo entre mis piernas.

-Si, somos nosotros, nuestra familia-le dije y el asintió sonriente.

-Me gusta esta familia, mamá, tu y yo para siempre-me dijo poniendome su meñique y yo sonreí juntando el mío con el suyo justo cuando lara bajaba las escaleras.

-¿Qué prometéis?-preguntó Lara sentándose a mi lado en la alfombra.

-Mamá, Gavi y Samu juntos siempre-le dijo su hijo acercando nuestros meñiques unidos a su lado que sonrió mirando al bebé.

Ella unió su meñique al nuestro y samu sonrió volviendo a ponerse a pintar.

La miré orgulloso, igual que ella a mi y creo que ambos leímos la mente del otro.

Me moría por besarla en este instante y sé que ella a mi también, con la única diferencia de que ella misma acortó la distancia entre ambos dándome un beso delante de Samu por primera vez.

El pequeño dio un salto de encima mía que nos hizo separarnos entre risas mientras él nos miraba con los ojos bien abierto y con una sonrisa de oreja a oreja.

-¿Sois novios?-preguntó y su madre y yo nos miramos riendo.

-Se puede decir que si-le contesté yo mordiendo mi labio.

-Yo lo sabiaaaa, yo sabía que a Gavi le gustaba mamá y a mamá Gavi-nos dijo tirándose encima nuestra para abrazarnos-somos familia para siempre-gritó contento y yo lo abracé acariciando su espalda.

-Somos una familia siempre, campeón-repetí sus palabras con orgullo.

Nos pasamos el resto del día jugando con samu, en el jardín, armando puzles e incluso jugamos un escondite por toda la casa que acabó con muchas anécdotas y risas, y con un pequeñín que acabó dormidito antes de las diez de la noche por el cansancio.

Fue el momento que Lara y yo aprovechamos para ponernos una peli en el sofá, ella se tumbó a lo largo y yo me tumbé entre sus piernas apoyando mi cabeza en su abdomen casi pecho.

Acariciaba sus costillas con las yemas de mis dedos lentamente mientras ella repetía el gesto en mi pelo, relajados.

-Mañana tengo que darle una respuesta al abogado-me dijo y yo la miré viendo que seguía muy preocupada con el tema.

Entendía su preocupación, aunque sabía que se volvía a sentir protegida, yo nunca dejaría que le hiciesen daño a ninguno.

Me levanté de su lado subiendo a mi habitación y volví a bajar con el portátil ej la mano.

-¿Qué..-la corté.

-Espera-le pedí y ella asintió.

Me metí en mi email mandándole un correo a Alberto detallando mi dirección y pidiéndole que hiciese un escrito que le llegase a Toni con cualquier dato que necesitase sobre el niño, estableciendo un régimen de visitar en las horas que yo no tenía entrenos para que no estuviesen solos y por supuesto con la condición de que no pudiese llevarse al niño con él.

Ella me miró cuando lo envié y yo acaricié su mejilla en forma de apoyo.

-No se si seré capaz de vivir sin ti a partir de ahora-me dijo y yo sonreí.

-Espero que no, porque yo sé que no sería capaz de vivir sin vosotros, rubia-le dije y ella sonrió dulce besando mis labios..

(CONTINUARÁ...)

¡Os leooo!❤️✨️