Skyfall [KM] CORRIGIENDO✓

LI

Después de tantos sentimientos encontrados por fin Jimin pudo estar un poco en paz.

Sus días en el palacio por el momento estaban siendo tranquilos.

Aunque allí no eran eternos.

Suzy se había acostumbrado rápidamente aquella vida, pasaba demasiado tiempo con su padre, hablándole de mil cosas, Soobin en cambio era mas reservado, no era tipico de un principe pero el doncel sabia que esto partia de una preocupación.

Soobin tenía miedo de volver a encontrarse con su madre de sangre. ¿Porque? Realmente Jimin no lo sabía. Decidió darle su espacio pero que se sintiera acompañado.

El doncel se dio cuenta que todo había cambiado y a la misma vez seguía igual.

Cuando Yuna le pidió hablar con él, acepto rápidamente. Había pedido que le preparasen una merienda, la joven no tardó en llegar a los aposentos de Jimin que ahora compartía junto a Jungkook.

Está decisión la tomo el sultán, alegando que estaría más seguro que durmiera junto a él. Sabía que era por puro egoísmo, a pesar de eso Jimin decidió que estaría de acuerdo mientras que el tendría otro aparte para no siempre estar en el del sultán.

Los Eunucos avisaron la llegada de la joven, está se veía más delgada y su rostro cansado, se reverencio con respeto hacia su amigo, Jimin sonrió y ordenó que todos se retirarán.

—Ven, siéntate— dicto suavemente Jimin, la joven todavía con la cabeza gacha, rápidamente obedeció sentándose frente al castaño.

Jimin la miraba extraña, está no era la joven que conoció hacia cuatro años atrás, un silencio incómodo se instalo, el doncel aclaro su garganta.

—Me dijo Suzy que los pastelitos son lo mejor, así que pedí para ti — comento, la chica levantó su mirada insegura y sonrió.

—Gracias... Mi sultán. — dijo bajo.

—Bien dime qué sucede Yuna, no aguanto está tensión tampoco tengo tiempo para esto, lo siento Pero se directa. — hablo Jimin.

La chica dudo un poco, sus ojos reflejaban la culpabilidad.

—Jimin... Sultán Jimin, lo he extrañado, la realidad es que desde que no está aquí, todo es extraño, sombrío y triste— comento Yuna —Pero tengo algo que decirle, sabe que soy su amiga y le jure lealtad.

El castaño solo la miro esperando que la joven siguiera hablando.

—Y-yo... He tenido encuentros con nuestro sultán...— susurro insegura.

Jimin hizo una mueca de disgusto, levantó su taza de té para tomarla pacientemente, la muchacha esperaba una reacción diferente, y le ponía de los pelos que el sultán no diga nada.

—Lo lamento.. es que

—No me interesa— declaro— lo que haya pasado entre Jungkook y tu es pasado Yuna, si solo me reuniste aquí para decirme solo eso, te invito a retirarte.

—¿No estás molesto?— pregunto temblorosa.

—No. —Dijo— Confío en mi esposo y se que estás mintiendo, lo que no entiendo es ¿porque lo haces?

—No miento si fui a sus aposentos — dijo más alterada.

—¿Estos aposentos en los que ahora duermo yo? — pregunto burlon— Tu me juraste lealtad, y ahora vienes a querer romperme... El miedo te cegó.

La joven se quedó callada.

—Haz lo que quieras Yuna, diles a todo el palacio que te acostaste con mi esposo, no me importa, hace mucho tiempo deje de sentir dolor