Skyfall [KM] CORRIGIENDO✓

XXVI

Cuatro meses después.

Jimin y Jungkook se encontraban en el jardín merendado, hoy los acompañaba Soobin, este no dejaba de hablar con el doncel, contándole absolutamente todo lo que hacía y quería hacer, Jungkook por otro lado solo apreciaba la escena.

El doncel ya estaba en el sexto mes de embarazo su panza ya era notoria, su cuerpo fue cambiando poco a poco, se notaba cansado, pero siempre lucía precioso.

Desde que el joven fue coronado, su vida cambio, ahora estaba en una posición más cómoda y privilegiada. Seguía tomando clases con la madre sultana, no tantas porque Jungkook ordenó que lo tuvieran como un verdadero príncipe.

Las cosas iban relativamente bien, aunque el pelirrojo intuía algo, desde hace unas semanas que Jeon estaba preocupado, lo podía notar en sus ojos.

—Soobin, ¿por qué no vas a recoger flores para tu abuela y tu madre? Yo después las ordenare y quedará como un ramo precioso  — ofreció el doncel, el niño asintió y no tardó en mirar a su padre, el sultán lo dejo ir, el niño corría rápidamente hacia las flores y dos guardias que lo cuidaban iban detrás de el.

—Quiero hablar contigo Jungkook...— dijo Jimin. El pelinegro asintió. — Se que no es asunto mío... Y tampoco quiero ser entrometido pero... ¿Sucede algo?

El sultán lo miro serio, no quería preocupar a su doncel y más sabiendo que estaba en cinta.

—Jimik cariño, no es asunto tuyo, los problemas que abarcan mi reinado los lideró yo, no te preocupes— contesto — toma, come más manzana.

El doncel supo que Jungkook estaba reacio en decir algo, tomo el pedazo que Jungkook le ofrecía.

—Creo que merezco saberlo, a pesar de mi estado, por alguna razón me hiciste  Valide-i Sa'ide ¿no? — insistió, el mayor suspiro y lo dejo de mirar.

Algunas veces Jeon de encerraba en si mismo, hundiendo todo sentimiento que pretendía salir sin permiso.

—Jimin...

—Jungkook— contraataco.

—Solo estoy ocupado con los rebeldes, solo es eso cariño. Últimamente andan muy...

—¿Rebeldes?— rio dulce— su majestad yo siempre voy a estar contigo, confía en mi, puedes contarme todo, sabes que mi lealtad y amor solo es para ti.

El pelinegro asintió sonriendo abrazo a Jimin y decidió que es momento de entrar.

Jimin tardó un poco en levantarse, Jeon lo ayudo, este agradeció y se fueron despacio caminando sin apuro.

Antes de que pudieran entrar un guardia que Jimin confía muy bien se inclino y comento algo en el odio de Jungkook, este frunció el ceño y asintió.

—Entra mi amor, tengo trabajo— fue lo único que dijo, despidió con un beso en la frente al doncel y se retiró con el guardia, Jimin quedo mirándolo, ¿que le ocultaba Jeon?

Decidió que por hoy era demaciado, sus pies dolían y su antojos eran una molestia. Como todos los días iba visitar el harén, de por sí casi nunca había problemas, solo una que otra muchacha inrrepetuosa pero nada grave.

Al entrar pudo notar como los Eunucos y esclavos iban de aquí para allá, Jimin frunció el ceño, los guardias anunciaron su llegada y todos se posaron a cada lado de la puerta.

—¿Que sucede?— pregunto.

Sana se acercó al doncel y se revenrencio.

—Jimin... Llegaron nuevos esclavos, y la madre sultana junto a la sultana Yeji están eligiendo a jóvenes para ingresar al harén— anuncio, el pelirrojo no le gustó lo que estaba escuchando.

—¿Que? ¿Y por qué no estaba avisado? Como  Valide-i Sa'ide es mi responsabilidad.

Jimin empezó a usar un tono más duro.

—Lo siento, es reciente.

—Llevame con la madre sultana, ahora.

Sana asintió llevando al doncel en dónde hace mucho tiempo el doncel había estado.

Cuando llegaron al salón, había una fila de mujeres muy bellas y jóvenes, el pelirrojo miro a la madre sultana está se acercó y sonrió.

—Jimin... ¿Que haces aquí?— pregunto, quizás lo hizo de una buena manera pero para el joven no lo tomo para bien.

—Todo lo que tenga que ver con el harén es mi responsabilidad, quiero saber porque nadie me avisó. — madre madre sultana se acercó y tocó el hombro del pelirrojo.

—Lo se, pero estás en cinta no quería...

—Soy un a Valide, e smi respobilidad madre sultana, lamento hablarle de este tono pero no tiene autoridad de decir que puedo o no hacer.

Yeji al escuchar aquello se metió en la conversación.

—Cuidado como le hablas a mi madre Criado.

La madre sultana miro a su hija con cara de regaño, Jimin en cambio en ves de quedarse callado le contesto.

—Por alguna razón tengo este puedo Sultana Yeji,¿ o acaso cree que no soy capaz?  — hizo una pausa, la hermana de Jeon iba a contestar pero Jimin volvió a hablar — ¿Consideras que tú hermano el sultán se ha equivocado?

Un pregunta venenosa, todos los que cuestionan las decisiones de Jungkook serán castigados, la chica enojada se retiró mirando con odio a su madre por no defenderla.

—Jimin basta, esto no fue para que te pongas de aquella manera, ven únete.

Jimin trato de calmarse, así que decidió hacerle caso miro a las jóvenes y la verdad eran preciosas.

—Ya que llegaste antes, ya elejiste quien será parte de las concubinas — aquello hizo que a Jimin le genere un mal sabor de boca.

—Si, ya las he elegido, pero la última palabra la tiene usted.

La madre sultana dió la orden de que las jóvenes elejidas den un paso al frente, Jimin las miro detalladamente a cada una de ellas, las veinte que había la madre sultana selecciono a diez y de las diez el doncel descarto a seis.

—Solo esas cuatro, las demás no me gustan.

Todos asintieron estando de acuerdo con lo dicho. Se retiraron para que pudieran prepararlas.

—No puedes descartar a tantas .— fue lo único que dijo Eunji.

—Solo seleccione a las más hermosas y las que tengan potencial.

—Ellas serán tu competencia.

—No me importa, es mi trabajo, el sultán confía en mí.— dijo— aunque antes de que se acerquen a su majestad tendrán que pasar por mi.

—Ellas te ven débil. — comento mientras se dirigían hacia el harén.

—Lo se.

—Ellas querrán tu puesto.

—Lo se.

—Jimin, no quiero que tomes lo que hice de mala manera, solo cuido a mi nieto.

El doncel la mira y sonríe triste.

—La gente cree que soy tonto, que no me doy cuenta de la forma que me miran y hablan de mi,¿ pero sabe algo madre sultana? Si ellos me atacan yo contraataco, que este en cinta no tiene nada que ver.

La madre sultana se queda callada, entonces después de un tiempo vuelve hablar.

—Hablaste con mi hijo.

Aquello hizo que el doncel no entienda a qué se refiere.

—El señor Kim, volvió a hacer el gran visir... Sé que...

Al escuchar aquello Jimin se altero, entonces se reverencio hacia la madre sultana se disculpo por qué tenía que irse.