I wanna be yours ★ Nate Archibald

⋆ 007 ⋆

*:･ﾟCapítulo 7*:･ﾟ

˗ˏˋ Nate se altera si te metes en sus asuntos sin preguntar 'ˎ˗

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No hay nada como el otoño en Nueva York. Pero no solo cambian las hojas. El aire tiene algo que descubre la realidad.

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Nina: 

Tomo mi café en silencio, mientras intercambio miradas con Lily, Eric y Chuck en la mesa del desayuno.

—¿Por qué están tan callados? —Pregunta Serena, llegando a la habitación.

—El lobo feroz llegó. —Contesto y mi hermano ríe.

—Respeto, Nina. —Mi padre aparece en la escena y ruedo los ojos. —Buenos días.

—Bart, regresaste antes. —Dice Serena sin mucho ánimo.

—Mis reuniones acabaron antes de lo esperado.

—Y regresas con la familia. —Habla Chuck. —¿Por cuánto tiempo?

—¿No se los dijo Lily? Me quedo un tiempo.

Serena y yo sonreímos fingiendo emoción mientras ella se sienta a mi lado.

—Y justo a tiempo para la fiesta de mañana. —Comenta Lily.

–-Quería preguntarte, ¿podemos traer amigos? —Pregunta Eric.

—Claro, cielo. —Contesta y dirige su mirada a Serena. —¿Viste el traje que dejé en tu cuarto, Serena?

—¿Era para mí? Creí que era el uniforme de la ama de llaves.

—Es conservador, pero clásico. Bart lo trajo de París en un asiento de su avión privado.

—¿Bart me compró un traje?

—Reloj nuevo. —Eric agita su muñeca.

—Dinero. —Digo señalándome y a Chuck.

—Transferencia en una de nuestras cuentas. —Agrega mi hermano.

—Ahora que estamos todos... —Comienza a hablar mi padre. —Lily y yo queremos hablar de algo. La fiesta de mañana es nuestro debut familiar y hemos hablado de lo que significa.

—¿Menos dinero para Nina y para mí cuando mueras? —Bromea Chuck y no puedo evitar reírme.

—Hemos pensado en ciertas normas. —Bart ignora el comentario.

—¿Normas? ¿Para qué? —Cuestiona Serena.

—Para nuestra vida juntos. —Contesta Lily. —Ahora que estamos todos aquí, necesitamos reglas. Cenar juntos los viernes.

—¿Los lunes no serían más...?

—Hora de llegada a la 1 a.m. —Sigue Bart.

—¿Hora del Pacífico o del Este? —Pregunto y mi padre me mira mal.

—No salir entre semana.

—¡¿En serio?! Mamá, ¿por qué hacen esto?

—Bart y yo lo hablamos. Estamos de acuerdo.