Cinco Años.

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- ¿Seguro que quieres hacer esto? No es necesario - Taylor y Daryl llevaban unos días juntos desde aquella declaración en Alexandria y ahora habían decidido ir a Hilltop por insistencia de él, para hablar con James.

- Es tu hermano muñeca - le respondió algo cansado por el viaje que habían hecho para llegar - Se que muchas veces no le agrado pero quiero hacer las cosas bien.

- Está bien, lo haremos como quieras... aunque parece tonto. Ya soy una mujer adulta y...

- ¿No quieres que lo haga? - él la tomó de la mano para que lo mirara, ambos estaban en el estudio de los líderes de Hilltop esperando por ellos y la chica parecía muy nerviosa.

- Si... no... no es que no quiera es que no veo porque tengamos que pedir permiso para estar juntos. - ella le sonrió y lo abrazó por el cuello para besarlo.

- Por qué necesito que James sepa que voy a cuidarte, que mis intenciones son serías.

- ¿Sabes? Jamás pensé que serías tan tradicional. - Taylor había descubierto una nueva faceta en Daryl en los últimos días, una que jamás creyó que existiera. No solo era increíblemente atento con ella, sino que quería hacer las cosas bien y lo demostraba el hecho de que hubiese insistido en hacer ese viaje solo para hablar con James.

- Lo siento - les dijo el pelirrojo entrando con Maggie a la habitación - Había algunos problemas en la cosecha... prometo que no habrá más interrupciones - había entrado tan apurado que no se dió cuenta que ellos estaban abrazados a punto de besarse pero Maggie no lo paso por alto y le sonrió a la chica divertida.- ¿Que era eso que me querían decir?

- Bueno... - empezó a hablar Taylor pero lo cierto era que no sabía que debía decir y miró al cazador en busca de ayuda.

- Cuando vivíamos en la granja, me dijiste que me alejara de tu hermana - James miró a Taylor con una mueca pues aquella conversación que había tenido con Daryl, era hasta ese momento, un secreto que ambos compartían - Y lo hice... la dejé ser feliz a pesar de lo que sentía.

- ¿De que estás hablando? - le preguntó la pelirroja a Daryl que solo negó con la cabeza para poder seguir hablando.

- No quería admitirlo pero a pesar de todo el tiempo que pasó... jamás deje de quererla y lo sabes. Aún cuando se fue por dos años, siempre fue ella... y siempre lo será. En los últimos días... pasó algo que jamás creí posible... ella me dijo que me ama. - James frunció el ceño al escucharlo mientras su esposa lo tomó de la mano con una sonrisa y Taylor sentía sus mejillas enrojecer.

- Lo suponía - le dijo James sorprendiendo a todos.

- La cosa es que si estamos aquí es para que sepas que estamos juntos ahora... mereces saberlo por nosotros  y se que no siempre fui tu persona favorita...

- Aún no lo eres - lo interrumpió James haciendo que Daryl suspirara por las contantes interrupciones porque aquello le estaba costando demasiado.

- Puede que no, puede que no nos parezcamos en nada... excepto una cosa. Ambos la amamos y queremos que sea feliz... y haré hasta lo imposible porque así sea. - Todos se quedaron en silencio y James miró a su hermana esperando que ella dijera algo pero en cambio, dió un paso adelante tomando la mano de Daryl para después sonreírle y James entendió que su felicidad estaba al lado de ese hombre ahora.

- Taylor siempre fue mí responsabilidad... mí mejor amiga y todo lo que me quedaba en este mundo cuando lo que conocíamos se terminó... necesito que me prometas que jamás vas a lastimarla, que la amarás cada día sin importar nada. Y hablo enserio Dixon. Se lo importante que es para ti cuidar a todos, aunque me cueste admitirlo, eres una buena persona pero si en verdad la amas... la harás tú prioridad, si tienes que elegir debes prometer que la elegirás a ella.

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