EL ENTRENAMIENTO ESTABA POR COMENZAR y el señor Kreese estaba hablando con algunos de los chicos.
—Tened en cuenta que Mogadiscio en los años 90 era un infierno.—les explicaba Kreese a Aisha, Halcón y Luna—Los señores de la guerra controlaban zonas enteras la cuidad. Mi equipo y yo tuvimos que limpiar el lugar.—explicaba mientras otros estiraban.
—¿A cuántos mató?—preguntó Halcón con un poco de miedo.
—¿Tú llevas la cuenta de las hormigas que pisas?—le pregunto Kreese y Halcón soltó una risa nasal.
—Qué pasada.—dijo Halcón emocionado.
—Tenían menos armas. Nosotros, menos hombres.—siguió explicando.—Chicos. Ruanda no fue cosa de broma.—dijo mirando a los tres chicos.
—Dirá Somalia.—corrigió Miguel al ponerse en pie y Kreese volteó.—Mogadiscio está en Somalia. Ruanda es otro país.—explicó Miguel.
—Claro, Somalia.—rió Kreese mirando a los tres chicos.—Pasé tanto tiempo en medio del desierto que se me mezcla todo.—dijo dándole la espalda a Miguel.
—¡Atención!—dijo Johnny entrando en la sala.—Tenemos alumnos nuevos.—dijo observando a los nuevos.—¡En formación!—anuncio poniéndose al frente.—Filas ordenadas y rectas.—dijo y se acercó a ver a los nuevos por las filas y se acercó a un hombre.—Los padres no pueden quedarse a la clase. Es por el seguro.
—No soy un padre. He...he venido...¡para aprender a dar caña, señor!—dijo el hombre.
—¿Te conozco de algo?—le preguntó Johnny.
—Soy el que le vendió el espejo.—contestó.—También estaba esa niña de ahí.—dijo señalando a Luna;—Conectamos bien. Hablamos de grupos de rock.
—Oiga, esta clase es para adolescentes.—le aclaró el sensei.
—Bueno, no me importa.—rió nervioso.—Los chicos no me asustan. Y mi madre no me cobra alquiler. Tengo mucha pasta...para gastar.—dijo y sacó un billete.
—Ya...—dijo Johnny y tomó el billete.—Hoy sólo será una prueba.—dijo volviendo al frente.—Creía que el otro grupo de alumnos nuevos era penoso. Pero, si hacéis lo que os diga, quizá lleguéis a ser luchadores. ¿Quién tiene huevos de enfrentarse al campeón?—preguntó hablando de Miguel. Nadie contestó.
—Yo misma.—se escuchó una chica contestar y todos voltearon.
—Conque tú, ¿eh?—preguntó Johnny acercándose.
—Vi vuestra exhibición en el Valley Fest. Sabéis hacer numeritos, pero ¿sabéis luchar de verdad?—preguntó la chica, tenia mechas rubias.
—Eso me suena a reto.—dijo Johnny.
—Me gustan los retos.—dijo con ganas de pelear.
—Señor Díaz.—dijo acercándose a su alumno.—Demuéstrele a la señorita sobrada de que va Cobra Kai.
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BLACK AND WHITE - Robby Keene
FanfictionLuna LaRusso, la mediana de la familia LaRusso, cualquiera que tuviese ojos podía ver los rasgos de Luna, porque fue adoptada por los LaRusso cuando tenia menos de un año. Y una pelea con 30 años arrastraría a cualquiera cercano al mundo karateca, p...