"Mío"
Silvia
Pasaron dos dias desde que llegamos de Valle de Bravo y no había sabido de Jorge nada.
Me imagino que estaba demasiado ocupado en el trabajo de su papá.
Pero al menos un mensaje diciéndome que estaba bien no le costaba nada.
Mis padres no estaban desde que llegué, Juanita la ayudante de mi nana había dicho que se habían ido de viaje a Monterrey, pero total ni me dolía que no me hayan avisado, siempre ha sido así se van y no sé cuando regresen.
Haya preferido quedarme en Valle de Bravo que aquí sola en mi casa solo con mi nana.
Miércoles temprano por la mañana, que se hace si todos tus amigos están ocupados entre semana trabajando en los negocios de sus padres.
Yo solo sé que quisiera andar de viaje por el mundo en vez de casarme.
Tengo que saber cómo está Jorge, así que se vayan a la mierda nuestros orgullos.
Me cambié rápido tomando lo primero que había en el closet, terminé de arreglarme y salí de inmediato a la empresa de el papá de Jorge.
En el camino recordé que no sabía dónde estaba la empresa, así que llame a Alex para preguntarle sobre dónde estaba.
—Hola Alex ¿sabes donde está la empresa de el papá de Jorge?—.
—Si—. Contestó.
—Pásame su dirección si—.
—¿Para?—.
—Tú pásamela voy a ir a visitarlo, solo no le digas que voy para allá—.
—Okey está bien Silvi—. Colgué la llamada.
Me paso la dirección y de inmediato la busque por el gps.
La empresa estaba a 15 min de la de mis padres, así que ya me sabía el camino.
Llegué y un empleado se ofreció a llevar mi camioneta a estacionar, le di las llaves y entre al establecimiento.
Para entrar necesitaba un gafe, tenía que sobornar a la recepcionista para que no avisara que yo estaba aquí.
—Hola linda necesito un gafe—. Le dije sacando mi identificación.
—¿Primera visita?—.
—Si, soy la prometida del hijo del jefe aquí—. Dije.
—Ya veo, tengo que hablar a presidencia—. Como va hacer eso si no le avise a Jorge que vendría.
—No llames, vine de sorpresa a ver a mi prometido, dame chanza por favor—.
—Mire señorita solo porque usted y el hijo del jefe hacen bonita pareja la dejo pasar si no no—. Hasta que. —Le daré un gafete permanente para que pueda salir y entrar las veces que quiera—.
—Si tienes problemas con Jorge hablas conmigo yo lo calmo—. Le giñe el ojo.
Me dio mi gafete, me dijo en que piso se encontraba presidencias y entré ahora si a la empresa.
Me subí al elevador para que me llevara al piso 12 del lugar.
Al llegar, pude notar que el lugar era muy amplio, había diferentes salas pequeñas para que los empleados se sentaran a tomar el café, muy innovador eso en la empresa no lo había pensando, en cambio tenían una terraza.
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De mi
Teen FictionUn empresario con riesgo a quedar en la quiebra, compromete a su hija con un empresario multimillonario, no se soportan para nada pero cuando se dan cuenta lo que en verdad cada uno siente, ahí algo que los separa.