Capítulo 62:
Era un día tranquilo cuando Max y Charles decidieron organizar una reunión con sus amigos del mundo de las carreras. Entre chistes, anécdotas de la pista y algunas estrategias para las próximas competencias, se sintieron como en los viejos tiempos, disfrutando del ambiente relajado que tanto les gustaba. Sin embargo, siempre mantenían a Natasha en mente, llamándola cada poco para asegurarse de que todo estaba bien con la bebé.
Por su parte, Natasha había decidido salir de casa para pasar un rato con su hija a pasear por el centro de la ciudad, disfrutando del aire fresco y de la tranquilidad de estar lejos del bullicio de la vida diaria. Mientras caminaban, de repente, alguien llamó la atención de Natasha. Al girar la cabeza, vio a un hombre que no había visto en años: su exnovio, con quien había tenido una relación en su adolescencia, antes de conocer a Charles.
El hombre, al notar su presencia, se acercó con una sonrisa genuina.
-Natasha, ¿qué tal? ¡Cuánto tiempo! -dijo, sorprendido pero agradablemente.
Natasha, un poco sorprendida al principio, sonrió también. Había algo en él que todavía le resultaba familiar, aunque el tiempo y la vida la habían cambiado mucho.
-¡Vaya, cuántos años! -respondió, sintiendo una mezcla de nostalgia y curiosidad-. ¿Cómo has estado?
La conversación fue amena. El ex de Natasha le preguntó sobre su vida, sobre cómo había sido su experiencia como madre, y de alguna manera, la conversación fluyó sin mucha incomodidad. Mientras tanto, él notó a la bebé en sus brazos, y sus ojos se iluminaron con una sonrisa.
-¡Qué linda está! -comentó, observando a la pequeña. -¿Puedo invitarte a un café? Me encantaría ponernos al día.
Natasha dudó un momento. Aunque había seguido adelante con su vida, el encuentro con su ex le trajo viejos recuerdos. Al final, decidió aceptar, pensando que no había nada de malo en un café entre viejos amigos. Al fin y al cabo, estaba segura de que Charles confiaría en ella.
Mientras estaban sentados en una pequeña cafetería, Charles, quien ya había notado la falta de Natasha, decidió llamarla para asegurarse de que todo estuviera bien. Al ver que no le contestaba, su preocupación aumentó. Finalmente, logró hablar con ella.
-Natasha, ¿dónde estás? ¿Estás bien? -preguntó con voz tranquila, pero al mismo tiempo preocupado.
-Sí, estoy bien. Solo salí a pasear con mi madre. Ahora estoy tomando un café con un viejo amigo -respondió Natasha, sin darse cuenta de lo que sus palabras provocaban.
Al oír la palabra "amigo" y recordar la presencia de su ex, Charles sintió una punzada en el estómago. Aunque confiaba en Natasha, la idea de verla con un hombre del pasado lo hizo sentirse incómodo, y un sentimiento de celos lo invadió sin quererlo. Sin embargo, decidió no decir nada en ese momento y mantener la calma.
Poco después, Charles llegó al lugar donde estaban. Al entrar, sus ojos buscaron a Natasha, y la vio sentada frente a su ex, conversando animadamente. La escena lo hizo sentir como si una nube oscura hubiera cubierto su ánimo. No sabía si la molestia provenía de los celos o de la incomodidad de ver a Natasha tan cerca de su pasado, pero algo en su interior comenzó a hervir.
Decidió mantenerse en silencio y se acercó, sonriendo de manera educada. Natasha lo vio y se levantó rápidamente.
-¡Charles! -exclamó, con una expresión de sorpresa al ver que él había llegado.
El ex de Natasha se levantó para saludarlo, pero Charles le dio un apretón de manos firme, aunque algo frío. No dijo nada, solo sonrió cordialmente, y luego, al mirar a Natasha, dijo:
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CORAZONES EN LA PISTA
Novela JuvenilEn el apasionante mundo de la Fórmula 1, donde cada segundo cuenta y la velocidad lo es todo, Natasha Verstappen regresa tras años de ausencia para reencontrarse con su hermano, Max Verstappen. Pero su regreso al paddock no es solo por nostalgia; Na...