55

93 13 7
                                    

-¿Por qué no puedes venir conmigo? -Jughead bufó tomando la mano de Betty intentando arrancarla de su silla mientras ella jugaba al Uno con Jellybean y Gladys-

Betty rió volteando a verlo.

-Porque actúas como un bebé y estoy jugando con ellas.

-No actúo como un bebé. Quiero estar contigo.

-Ven y sientate conmigo entonces.

-No, quiero estar solo contigo.

Betty rió tirando un +2 para la rubia mas pequeña.

-Lo siento, Juggie. No seas caprichoso.

-Pero-

-Ni dramático.

-Estás pidiendo muchísimo -FP entró a la cocina- Oye, rey de los berrinches ¿Qué te parece si haces algo útil y limpias el auto? Está lleno de paquetes de tus papas fritas.

Jughead bufó sentandose junto a Betty.

-No es justo.

-Ya, bebé. Termino esta ronda y podemos ir a tu cuarto.

-¿Me dejarás enseñarte a jugar videojuegos de terror?

-Lo que tu quieras.

-Okay -sonrió-

Jellybean rió mientras seguía jugando.

-Eres un niño insoportable ¿Sabías eso?

-Tú tambien y no te digo nada. Me robas a Betty.

-Si vamos a hablar de robarse a Betty, yo llegué primero. Ella estuvo conmigo todo este tiempo mientras tú no estabas. Betty es mía.

Jughead rió por lo bajo y miró a Betty, quien no despegaba la vista de sus cartas.

-¿Tú que opinas, preciosa?

Ella se encogió de hombros y se redujo a tirar una carta.

Jughead sonrió y besó su mejilla mientras ellas seguían jugando.

☆♡☆

-Pero no entiendo porqué no puedes quedarte a dormir conmigo -Jughead se quejó, abrazando a la rubia- Quédate conmigo.

Betty sonrió y besó su cabeza.

-¿Qué pasa, bebé? -ella murmuró-

-¿Con qué?

-Estás muy...

Pesado.

-Estás muy pegado a mí hoy. No paras de quejarte cada vez que me alejo un poco de tí.

-Lo siento -murmuró bajando la mirada-

-No no no -Betty levantó su rostro delicadamente y dejó un beso en sus labios- No es algo malo, mi amor. Claro que no. Pero es raro; nunca haces esto.

Él se acercó a abrazarla de nuevo y se acomodó en su pecho.

-Es que te quiero cerca -susurró- te necesito cerca.

-Okay. Estoy aquí, bebé.

-No te vayas -dijo en un tono de voz adorable-

Betty suspiró acariciando su cabello.

-Déjame llamar a mi mamá.

-Bien. Gracias. Te amo.

-Yo te amo a tí, Juggie.

-Lo siento por ser así. Es solo que te necesito. Anoche dormí muy mal. No soporto tenerte lejos.

Betty sonrió acariciando su mejilla. Nadie jamás le había dicho algo tan hermoso.

-Está bien, mi amor. No ire a ningún lado.

King of rock 'n rollDonde viven las historias. Descúbrelo ahora