King of rock 'n roll

80

El pasar de las semanas no fue desapercibido. Cuando un mes había transcurrido, todos se habían acomodado al ritmo de vida.

Menos uno.

-Papá -Jellybean dijo delicadamente acercándose a la cama de su padre- ¿No llegas tarde al trabajo?

Él negó con la cabeza.

-Papá, faltaste ayer y anteayer también.

-Cariño -dijo con la voz ronca, sin abrir los ojos- Ve a la escuela. No te preocupes por mí.

-Pero si me preocupo.

-No hay de qué preocuparse, hermosa. Suerte en la escuela.

Ella suspiró y salió de la habitación. Tomó su mochila y bajó a la cocina.

-Mamá, papá aún no se levanta.

-Cariño -suspiró- Tranquila. No es tu responsabilidad. Ve a la escuela, yo hablaré con tu papá y me aseguraré que estés bien.

-¿Lo prometes?

-Lo prometo. Tranquila.

-Okay -dijo en un tono preocupado- ¿Estás segura de que estará bien?

Gladys asintió y acercó a su hija con suavidad para envolverla en sus brazos.

-Es normal, mi amor. Extraña a tu hermano. Imagina cómo yo me sentiría si tú tuvieras que irte por un tiempo indefinido y solo puedo verte dos veces por semana.

-Mal -respondió abrazándola con fuerza-

-Claro que sí. Él se siente así. Jughead y tú son todo para él.

-Más Jughead que yo -murmuró-

-No digas eso, cariño. Las cosas no son como antes.

Jellybean asintió separandose del abrazo.

-Adiós, mamá.

-Adiós. Avísame cuando llegues.

Cuando su hija se fue, Gladys subió a su habitación y vio a FP acostado de espalda a la puerta, llorando silenciosamente.

Se acostó a su lado y lo abrazó sin decir una palabra.

-¿Soy un mal padre?

-No. Eres el mejor padre. ¿Por que dirías algo así, FP?

Él volteó a verla, revelando sus ojos rojos e hinchados.

-Se que tiene que estar allá. Lo necesita, le está haciendo bien y realmente está mejorando. Pero quiero traerlo a casa -dijo a la vez que su voz se debilitaba- Quiero tenerlo aquí conmigo. Lo extraño. Quiero cuidarlo yo.

-Okay -murmuró acariciando su mejilla- Eso no te hace mal padre. Extrañas a tu hijo, eso es normal. Sé que no vas a sacarlo de ahi y eso es lo que importa. Siempre pudiste mantenerte fuerte para ayudarlo a hacer lo mismo. Creo que eso es lo que más admiro de tí. Esa es tu esencia, FP; eres un buen padre.

Tras un pequeño sollozo, se acercó a abrazarla, llorando silenciosamente.

-Estará bien -susurró calmándolo- Jughead estará bien.