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-¿Por qué no puedo ir? -Jellybean se quejó-

-Porque Jughead nos pidió que no vayamos ¿Si? Debemos hacer lo que es mejor para tu hermano. Él quiere que su padre lo vaya a buscar él solo y sin nadie más. Debemos respetar eso.

-Okay -dijo de mala gana-

-Oye -Betty interrumpió sentándose a su lado- Yo también quería ir. Pero entiendo que todo esto es mucho para Jughead y él y su padre pasaron por muchas cosas solos hasta llegar a este momento. Es lindo que quiera estar con él. Es bueno. Y estoy segura de que cuando llegue va a morir por abrazarte y pasar tiempo contigo ¿Si?

La menor asintió, apoyándose en su hombro.

-Tu padre me envió un mensaje -Gladys afirmó acariciando el cabello de su hija- Están en camino.

Intentando ocultar la sonrisa en su rostro, Betty miró su teléfono.

Juggie

Ya estoy yendo a casa.

Te extraño tanto, no puedo
esperar.

Yo tampoco puedo esperar

Te amo, bebé.

Yo a tí.

Betty dejó su teléfono a un lado y se acomodó en el sofá charlando con Jellybean y Gladys, para distraerse hasta que Jughead llegase. Luego de mas de una hora, oyeron la llave en la cerradura de la puerta principal.

Jellybean saltó del sofá y corrió a la puerta. Ni siquiera dejó que su hermano entre para abalanzarse hacia él, abrazándolo con fuerza.

-Volviste -murmuró tranquila-

-Te lo prometí, enana.

Ella sonrió y él la sostuvo, acariciando su espalda.

-Te extrañé tanto, Jug.

-Yo te extrañé a tí. Mucho más de lo que crees.

-¿En serio

-Claro que sí, JB. Te extrañé muchísimo.

Su hermana respiró profundo tomando su mano.

-No volveras a irte ¿Verdad?

-No lo creo. Creo que podré quedarme en casa.

-Okay -dijo aliviada-

Jughead besó su frente y se dirijo a su madre. Ella lo abrazó suavemente y acarició su espalda, sintiendo el aroma de su ropa.

-Comiste mejor -murmuró-

-Sí. Si no lo hacia, no me dejaban volver.

-Bien hecho, Jug.

-No fuiste a verme -él susurró al abrazarla- Eso me entristeció.

Ella asintió acariciando su mejilla.

-Lo siento, cariño. Se que estuvo mal. Era demasiado para mí; verte alli luego de la primera semana cuando estabas destrozado...no podía ver a mi hijo así. Si te veía, iba a sacarte de ahí y eso no era bueno para tí. Espero que puedas entenderlo.

-Entiendo -dijo separandose del abrazo- Está bien. Estoy aquí ahora.

Alejandose de su madre, Jughead se acercó a su novia y la levantó del suelo, abrazándola con fuerza.

-Hola, preciosa -murmuró- ¿Me extrañaste?

-Sí. No vuelvas a irte.

-Jamás.

Él besó sus labios repetidas veces y se lanzó al sofá aún abrazándola con fuerza.

-Okay, les daremos espacio -su padre afirmó- Pero no tanto espacio.

Cuando su familia entró a la cocina, Jughead volvió a besar a su novia con suavidad y delicadeza.

-Mañana tenemos una cita, Cooper.

-¿Mañana? -sonrió-

-Sí. Ya tengo todo planeado. No tienes idea.

Ella sonrió entusiasmada. Jamás nadie había planeado nada para ella.

-Te amo, Juggie. Gracias por volver.

-Gracias por ayudarme, preciosa.

King of rock 'n rollDonde viven las historias. Descúbrelo ahora