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-Te ves bien, Juggie -Betty sonrió, acariciando el cabello de su novio mientras él bebía una malteada-

El pelinegro le devolvió la sonrisa, sentandose a su lado en el cesped.

-Me siento bien.

Ella besó su mejilla y lo abrazó.

-¿Crees que te dejarán ir pronto?

Él dudó antes de responder. Realmente no lo sabía, no había forma de saberlo.

-No estoy muy seguro. Si ven que estoy bien... supongo que sí. Pero no creo que me dejen ir aún.

-Okay -dijo apoyándose en su hombro- Está bien. Me alegra que estés mejor.

-Gracias, princesa. Te extraño todo el tiempo.

-Yo a tí. Ya pasó mucho tiempo y no me queda mucha ropa por usar -expresó con tristeza-

-¿Qué?

-Tu ropa. No hay tanta.

-Puedes lavarla, bebé.

-Sí, pero cuando la lavo ya no tiene tu olor. Y ya lavé la mayoría.

-Okay -rió- ¿Quieres que vaya a mi cuarto y te traiga ropa que tiene mi olor?

-Sí.

-Muy bien. Espera aquí.

-Espero aquí.

Jughead se fue, dejandole su malteada a su novia. Betty se limito a mirar el cielo despejado, sin prestar mucha atención a lo que pasaba alrededor. Asi fue hasta que sintió una presencia junto a ella.

-Oh -dijo exaltada- Me asustaste.

-Lo siento -el chico de ojos marrones se disculpó- Hola.

-Hola -sonrió-

-¿Eres su novia?

-¿De Jughead? Sí. ¿Por qué?

Él se encogió de hombros.

-No lo sé. Siempre vienes a verlo. Debes amarlo mucho.

-Pues...sí. Claro que lo amo mucho.

-Soy Ben.

-Betty.

Ella estrechó su mano y volvió a mirar hacia arriba. Luego de solo un segundo, miró a su alrededor. En general, cuando ella iba a ver a su novio, estaba lleno de familias visitando a sus hijos, hermanos, novios. Ese día no era la excepción.

-¿Y tu familia? -preguntó mirando al chico de cabello dorado-

Él negó con la cabeza con una expresión tranquila.

-No vienen a verme.

-¿No? ¿Por qué?

-No me aman.

-Oh.

-Sí. Oh.

-Eso es horrible.

-Un poco. Pero estoy bien.

-Eso es bueno.

-Sí -rió- es bueno hasta que tengan que venir a buscarme.

-¿Tus padres?

Él asintió.

-Pero bueno. ¿Por qué tu novio te dejó sola?

-Lárgate -Jughead dijo sin mirarlo a los ojos, mientras se sentaba junto a Betty- No hables con mi novia.

-No seas malo, Jug. Solo me habló. -ella respondió-

-Adiós, Betty.

-Adiós.

-Adiós, vete.

La rubia miró a Jughead algo confundida y él le dio 3 suéteres, una camiseta y un pantalon.

-Juggie ¿Por qué le hablaste así?

-Porque es un idiota. Sus padres ya no vienen a verlo porque intentó abusar de su hermana. Está aquí hace seis meses, la única persona que vino a verlo desde que llegué es su novia y cortaron porque él la golpeó.

-Oh.

-Sí. No lo quiero cerca tuyo.

-Yo tampoco -dijo acercándose a su novio, a besar sus labios rapidamente- Gracias por la ropa. Eres el mejor.

-Te amo. Te daría mi vida si la quisieras -afirmó acariciando su mejilla-

-Jamás te la pediría, Juggie. Te amo.

King of rock 'n rollDonde viven las historias. Descúbrelo ahora