Capítulo 8: Dudamos de lo cierto

520 42 0
                                    

-Suelta el teléfono-pronunció mi madre mientras yo navegaba por las redes sociales.

-¿Que sucede?-digo apartando la vista de mi móvil. Mi madre limpiaba ansiosa los pisos de la casa mientras mi padre preparaba la mesa para las visitas que llegarían dentro de una hora.

-Ayuda con algo, ve a vestirte, no puedes recibir a los amigos de tu padre con esa pinta- dijo mi madre mirándome de arriba a abajo, sonreí y fui a mi habitación. Tomé un vestido blanco sencillo y unas sandalias que hacían juego. Simplemente me peine y me dirigí nuevamente a la sala.

-Mucho mejor-dijo ella mientras terminaba de pasar la escoba debajo del mueble de la televisión. La CNN era un canal que se había vuelto estático después de que ese mismo día alguien filmara a un hombre disparandole a otro  veinticuatro veces en el cuerpo. La gente buscaba respuestas a esta locura y parecía ser que la CNN lo sabía todo. La señora de cabello castaño sostenía firme el micrófono. Se encontraba en la zona del "crimen". Lo peor de todo era que el hombre con veinticuatro disparos en su cuerpo seguía caminando y que el que había disparado aseguraba que el le disparaba porque no tenía vida. Todos lo trataron de loco. Ahora en ese lugar habían por lo menos diez canales de televisión, cuatro autos de policía y dos ambulancias. A pesar de todo el movimiento el resto de la gente, en sus casas, no estaban sorprendidos, es decir, era un vídeo, a pesar de ver todo el caos en esa zona dudaban de que algo así hubiera sucedido. Habían teorías pero la humanos somos así, dudamos de lo cierto, y damos por cierto lo que esta en duda.

El timbre sonó y los tres amigos de mi padre entraron a la casa. Vestían traje formal como si fuera una cena de gala y yo mientras miraba mi vestido algo arrugado y con un poco de olor a humedad. Patrick, Luke y Chris eran viejos amigos de papá. Claramente se conocieron en el trabajo pero la amistad era más grande al compartir aficiones, ya sea las carreras de caballos o el partido político en común. Y así era, cada vez que venían mi padre lloraba de risa y con mamá contábamos las horas para poder ir a dormir. Se sentaron en la mesa de la sala mientras yo ayudaba a mi madre a llevar la comida y a terminar de preparar el postre. Ya en la mesa todos empezamos a degustar la maravillosa carne que había cocinado mamá, acompañada con una salsa de tomate que quedaba perfecta con unas papas al horno. 

-David, dime, ¿que crees de lo que ocurrió con ese hombre?-preguntó Patrick mientras se llevaba otro bocado de carne a la boca.

-¿Te refieres al muerto viviente?-bromeo Chris.

-No he visto el vídeo. Susan a dejado la televisión en el noticiero todo el día, pero la verdad es que no le he dado mucha importancia- pronunció mi padre.

-Es algo increíble, el hombre sigue caminando con toda esa sangre al rededor-dijo mamá.

Yo escuchaba la conversación mientras pensaba en lo bien que me vendría tener a Jack a mi lado. Había ido de campamento con sus amigos.

-¿Tu que crees, Maggie?- me pregunta Patrick y enseguida todos los ojos se enfocaron en mi.

-Yo... creo que es cierto... es decir tiene que serlo-dije algo dudosa.

-¿Que te hace pensar eso?-pregunta Chris interesado.

-Bueno, la sangre por todos lados y todo el movimiento que se produjo. 

-¿Y el cuerpo?- me subestimó Patrick. Era verdad el cuerpo del hombre ensangrentado no estaba por ningún sitio. Solo un rastro de sangre que se fue borrando.

-Pues no lo se...-dije tomando el tenedor de nuevo.

-Tal vez sea un zombie, ya saben como lo de las películas-rió Chris y al cabo todos los siguieron menos yo. Es decir, la idea de que eso estuviera pasando era imposible pero me enfadaba mucho la gente que me subestimaba y Patrick lo había hecho. 

Luego de cenar nos sentamos todos en los sillones frente al televisor que ahora estaba en el canal TNT reproduciendo como siempre algunas de las películas de Harry Potter. Tome mi Iphone y le envié un mensaje a Jack, estuvimos hablando algunos minutos hasta que sentí la vista pesada de mamá en mi y supuse que quería que soltara en teléfono. Si, tenía veintidos años pero aún tenían esa clase de control sobre mi, no se si control, más bien era la educación y valores que me habían transmitido. Todavía me retaba cuando no ordenaba mi pieza o cuando tomaba algo de más. De vez en cuando me preguntaba si había hecho la cama, como también si necesitaba algo. Papá aún insistía en ayudarme para la universidad o si necesitaba el auto las llaves estaban siempre sobre el mueble junto a la puerta.

Hoy, en este mundo muerto daría todo de mi para sentir la  voz de mamá diciendo que deje de usar el teléfono o que deje de dejar las cosas tiradas en mi pieza. Amaría sentir a mi padre discutiendo de buena forma con sus amigos sobre caballos o hablando de fútbol americano. No me importaría que Patrick me subestimara o que Chris hiciera esos ruidos horribles cuando comía. Daría lo que fuera por mandarle un mensaje a Jack y que me respondiera con esos emojis que utilizaba para cada situación. Daría mi vida por volver a lo que era. Daría lo que fuera para volver a esa mesa y creer en lo que dudábamos. 




CUANDO LOS MUERTOS VIVEN -The walking dead (Maggie y Glenn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora