37: Los tipos duros no bailan

92 5 0
                                    

Arriba os dejo algo muy bonito y curioso que he encontrado. Hace como 5 años, cuando empecé la historia, escuchaba covers de ese chico, de hecho la que os dejo es la primera que escuché. Se llama Leroy Sánchez y hoy, después de llevar 5 años también sin escuchar nada de él, he vuelto a encontrarlo. ¿Y por qué es especial? Aparte de lo obvio, que es su increíble voz de ángel, es que hasta ese momento nunca había escuchado el nombre de Leroy, y es el motivo de que se lo pusiera al ex de Alyson. Me parece un nombre precioso. Chequear covers de este chico, es alucinante, enserio.

Bueno, dejando eso a un lado. FELIZ 2016. 

Tengo el presentimiento de que este año va a traer muchas cosas buenas.

He escrito un par de capítulos de Cuando el cielo baja al infierno, y de momento tengo 55. OMG. Me quedan por lo menos tres para terminarla del todo. Así que voy a ir subiendo capi por día, o como mucho cada dos días. 

Y como regalo de reyes, subo 3 capis.

Este os va a parecer interesante ;)

Besis!

.


Alyson sintió que hasta el último recoveco de su cuerpo se estaba erizando. Se le anegaron los ojos en lágrimas y se echó a llorar. De felicidad.

Te quiero, Alyson.

Enamorado.

De verdad.

Para siempre.

Sus palabras se quedaron marcadas en su corazón.

–Jamás lo habría imaginado –susurró, más por decir algo que por otra cosa.

Su mente se había quedado completamente en blanco. Esto era lo último que habría esperado.

Él la quería. Como ella a él. El amor correspondido era la cosa más grande que Alyson había sentido en la vida.

Llevada por sus emociones, le echó los brazos al cuello.

–¿Estás llorando? ¿Tanto me odias?

En el trasfondo de su tono bromista, Aly pudo oír un ligero timbre sorprendido. Zac no había esperado que su confesión fuera a hacerla tan feliz como para llorar. ¿Qué había esperado entonces? Ella le quería tanto, tanto...

La música cambió.

Se notaba que esta canción no la había elegido el chico. Llevaba la marca de su hermana por todas partes. La voz de la cantante era aguda y melodiosa, y además se oían pájaros piando de fondo. Le recordó a la película Blancanieves.

Se quedaron en silencio. Mientras la música le llenaba los oídos, Aly acariciaba lentamente la nuca del chico.

Él la separó un poco de su cuerpo. Parecía inverosímil que minutos antes, intentando planear cómo confesarse, había estado más nervioso de lo que querría admitir. Aunque sabía que Alyson no iba a rechazarle, los nervios habían sido inevitables.

Deseaba hacerla feliz. Y que se sintiera segura. Había dudado de él aquella mañana y Zac no quería que eso volviera a ocurrir jamás.

Se fijó en las pestañas de la joven. Había diminutas gotitas en ellas, pero ya no estaba llorando. Quería besarla. Lo necesitaba. Le dio un beso primero en los párpados cerrados, notando la sal de las lágrimas, y después en los labios. Se besaron con parsimonia, al compás de la paz que transmitía la canción.

Cuando el cielo baja al infierno.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora