Capítulo 21.

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-Buenas tardes, señor Díaz – saluda Rafa con educación a mi padre.

-Oh, por favor, Rafa – escucho su risa grave.- Llámame Vicente.

Observo, de reojo, a Rafa asentir con una sonrisa y ambos unir sus manos en un fuerte apretón. Tras eso, saludo a mi padre con un beso en la mejilla para después ir en busca de mi madre hasta encontrarla.

-¿Vamos a la terraza?

Rafa asiente, entrelazamos nuestras manos y nos dirigimos al lugar.

-¿Te has decantado sobre algún trabajo ya?

Mis ojos se posan sobre los suyos y niego con la cabeza mientras peino mi pelo pensativa.

-Me han aceptado en una tienda, supermercado y panadería.

-¿La tienda de ropa de qué es?

Le miro con el ceño fruncido.

-Ropa de mujer y hombre, también de ropa interior.

Rafa asiente y, por un momento, creo saber las intenciones que tiene. Besa mi mejilla para después dirigirse hacia mi boca.

-Ves a esa – sugiere.- Así puedes tener ropa interior sexy para tu novio.

Río.

-Sabía que alguna intención tenías.

Rafa ríe, provocando así que mi corazón se acelere como otras tantas veces y mis mejillas se enciendan. Sus labios y los míos se unen otra vez y saboreo nuestro beso.

-Entonces, coge ese trabajo.

Ruedo los ojos y río a la vez que niego con la cabeza.

-Eres un caso perdido, Rafa.

***

-¿Mañana vas a la verbena? – me pregunta desde la otra línea de teléfono.

Dejo mi bolso sobre mi cama para después deshacer la coleta que llevaba en el trabajo.

-¿Mañana es sábado?

-Sí, ¿por qué?

-Nada – murmuro mientras quito mis zapatillas.- Ando un poco desorientada.

Escucho su risa al otro lado de la línea.

-¿El trabajo?

-Sí.

Suspiro.

-¿Cómo te va?

-Bien – contesto.- Vienen muchos clientes y el horario me agota.

-¿Empiezas a las ocho?

-No, a las siete y media para preparar todo.

-Pobrecita – murmura y puedo jurar que sonríe en estos momentos.- ¿Quieres venir a mi casa y que te haga un masaje?

-Anda, Rafa, ríete con otro.

Él estalla a carcajadas.

-Lo siento, es que me apetecía hacerte rabiar.

-Tonto... - murmuro.

-Bueno, te dejo que ahora tengo que ir a comprar cosas para la churrería. ¿Paso por ti mañana a las diez?

-Claro – sonrío.- Nos vemos, guapo.

-Adiós, preciosa.

***

-¡Nena, Rafa está aquí!

Coloco bien mi short denim tiro alto bajo con deflecado negro y mi top de tirantes con nudo blanco para después peinar mi pelo y tomar mi bolso. Al salir de mi habitación y llegar a la entrada, veo a Rafa hablando con mi madre. Corro hacia él y beso sus labios para después despedirme de mis padres.

Mi primer amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora