Capítulo 3: Presentándose con ironías.

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A mediados de mayo en el hospital me  derivaron a cardiología, mi primera jornada fue bastante excitante, un paciente diagnosticado con miocardiopatía isquémica que había sido trasplantado hace un par de meses fue a su chequeo mensual para saber cómo evolucionaba.
Se veía en perfecto estado y era impresionante ver como el corazón de otra persona se había adaptado rápidamente a su cuerpo sin presentar complicaciones o rechazos.
El paciente tendría que ir constantemente a sus controles rutinarios hasta que el periodo de prueba ya fuese levantado, probablemente no vería su evolución, pero estaba segura que continuaría su vida por muchos años gracias a la persona que le otorgó una nueva oportunidad.

También tuve una ronda en el área de urgencias donde un anciano entró con una notoria taquicardia, monitoreamos su estado y tratamos de estabilizarlo con medicación para evitar un paro cardíaco logrando sacarlo del estado que se encontraba. Al terminar mi día no estaba arrepentida de haber llegado a cardiología, fue un tiempo rápido y lleno de emociones que al principio no estaba convencida de querer experimentar, pero estaba por llegar a mediados de junio, lo que significaba que mis exámenes se acercaban sin compasión y tendría que dejar cardiología para pasar a una siguiente etapa, me sentía un poco extraña, quizás me había encariñado o simplemente sentí que el tiempo pasó tan rápido que no lo pude disfrutar como me hubiese gustado.

Por otra parte la universidad y la clínica me tenían tan absorta que era difícil ver a Vale y a Javi con la frecuencia que lo hacíamos antes, sin embargo todos los domingos nos hacíamos un tiempo para almorzar juntas y no sentir el distanciamiento que provocaba mi falta de tiempo. Seungri tampoco permitió que lo dejara en el olvido me llamó constantemente para saber que estaba bien, si comía y dormía lo suficiente o simplemente para darme ánimo tras pasar una noche en vela estudiando para mis exámenes finales.

Ocho días más tarde y a una semana de finalizar junio me liberé de mis exámenes en la universidad aprobando todo los prácticos de urgencias y cardiología, pero aun así tenía que comenzar a prepararme para los finales que serían la primera semana de julio.
Al salir del hospital me reuní con Seungri y las chicas para ir de paseo por Seúl, nos comentó que Daesung estaba muy entusiasmado por ir con nosotros, pero la noche anterior había comenzado a tener fiebre y al despertar estaba aún peor sin saber qué hacer con ella.

Vale: ¿Acaso no sabes que somos enfermeras y _____ una futura doctora?

Seungri: ¡Oh es cierto! No lo había relacionado, pero... ¿No les molesta?

Javi: ¡Aish! No seas tontito, para la próxima tienes que decirnos en cuanto ocurra algo.

_____: Pero antes tenemos que pasar a casa a buscar mis cosas.

Nuestra paseo turístico por Seúl se pospuso y después de pasar a buscar mis cosas llegamos a casa de los chicos. Al entrar no había nadie en casa más que un enfermo Daesung recostado en su dormitorio, Vale y Javi intentaba disimular su emoción, y creo que solo porque las conocía fui la única en notarlo.
Saqué mi estetoscopio y con la ayuda de las chicas lo sentamos en la cama, Seungri nos observó atento sin dejar de moverse con impaciencia de un lado a otro. Mientras escuchaba sus latidos de lejos escuché la característica risa de Top que entraba a la casa junto a Taeyang, entraron a la habitación y noté como la actitud tranquila de las chicas se tornó un poco nerviosa.

Top: Yo también estoy muy enfermo y necesito la atención de una bella enfermera -dijo entre bromas y risas-

Todos rieron y luego pedí silencio para continuar escuchando, sus pulmones se oían bien, pero su respiración era algo agitada por la fiebre. El sonido de la puerta volvió a interrumpir, esta vez se escuchó la voz de una chica, me di cuenta que el rostro de Taeyang se tornó muy serio borrando todo rastro de la sonrisa que había hace unos segundos.
El silencio abundó en la habitación tornando la situación un poco incómoda, pero nadie dijo nada.
Ji Yong entró a la habitación de Daesung y se abrió paso entre los chicos para ver que ocurría, tras él una chica alta, muy delgada y con una melena un poco más arriba de sus hombros tomaba su mano, parecía una modelo, pero extrañamente no era muy linda, quizás el exceso de maquillaje o la cara de desagrado con la que miraba todo no la hacían ver bien.

You Got Me Losing My Mind (GD y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora