You Got Me Losing My Mind (GD y Tú)

Capítulo 2: Conociéndonos.

Desarrollamos una amistad rápidamente, en un mes ya no había formalidades o restricciones por haberlo conocido como mi paciente.

Vale: ¿Hoy viene de nuevo?

_____: Sí, aunque no me dijo que haríamos.

Javi: Aún no puedo creer que seas su amiga, o sea, a veces a esta clínica vienen algunos personajes, ¡pero llegaste a ser su amiga!

Vale: Es verdad, cuando vienen generalmente son muy discretos y evitar el exceso de interacción.

_____: ¿Ustedes sabían de su grupo?

Javi: Muy poco, habíamos escuchado hablar de ellos un par de veces, pero nunca nos llamó mucho la atención, estamos aquí por trabajo.

Vale: Tienes suerte que nadie entiende cuando hablamos en español o todos sabrían de su amistad.

Javi: Y esas babosas que están en recepción intentarían acercarse a ti con tal de tener una oportunidad de volver a verlo.

Un par de horas más tarde y con mi turno finalizado caminé hasta la salida junto a Vale y Javi, estábamos agotadas, ya que ese día hubo mucho movimiento en la clínica y lo único que queríamos era llegar a nuestras casas dormir más de ocho horas, levantarnos tarde y no tener que poner la alarma para levantarnos temprano, por suerte el fin de semana estaba por comenzar para reponer nuestra energía y holgazanear lo suficiente por dos merecidos dias.
Mientras hablaba con las chicas Seungri se acercó a nosotras con una cajita en sus manos, de ella sacó café para nosotras, ya se le había hecho una hábito llevarnos algo caliente cada viernes por la noche que iba a buscarme, hablamos un par de minutos y propuso un día salir todos a recorrer Seúl, pero luego pensó en viajar a otra ciudad cercana, ellas al escuchar eso se veían emocionadas y no tardaron en aceptar. Con la propuesta hecha y acordado todo nos despedimos de ellas y fuimos a caminar por el río han, estaba tan cansada que no era capaz de seguir moviéndome así que le pedí que nos sentáramos un momento, accedió a mi petición y se sentó junto a mí, comenzó a hablar de las ciudades a las que podríamos ir y en que debíamos viajar, algo provocó su silencio, el que duró por varios minutos, le pregunte si había pasado algo ya que no era alguien que pudiese mantenerse en silencio por mucho tiempo, mi pregunta lo sacó de sus pensamientos volviendo a encontrar su mirada con la mía, decía que tenía que presentarme a sus amigos, tal como yo le había presentado a las mías y sería esa noche, intenté convencerlo de lo contrario, no quería conocerlos con ojeras en los ojos y bostezos que no podría controlar, no convencido siguió mirándome con sus ojos entrecerrados.

Seungri: ¡Mañana! Mañana es sábado y no tienes que ir al hospital ni a la clínica, así que mañana quiero que vayas a cenar a casa.

_____: Esta bien, mañana cena en tu casa, entendido.

Seungri: Pasaré por ti a las 7, ahora vamos, tienes que ir a casa es cierto que hoy te ves más cansada de lo común.

_____: ¡Oyeee! -le daba un pequeño empujón con mi brazo, me rodeo por los hombros y caminamos hasta su auto-

Estacionó su auto fuera de mi edificio, lo invité para que comiéramos algo ya que él tampoco había cenado. Subimos hasta mi departamento y rápidamente preparé spaghetti, mientras comíamos hablábamos de cómo había sido nuestra agitada semana y lo que nos esperaba para la próxima, curioso me preguntó si había dejado algún novio en _____, metiendo un bocado a mi boca hice un gesto de negación con mi cabeza, me miraba como si quisiera saber más al respecto así que trague lo que masticaba y le conté la situación antes de llegar a Corea, llevaba un año con un chico, pero al decirle que viajaría a Corea por un tiempo mínimo de dos años decidió terminar nuestra relación ya que no podía esperar tanto tiempo por mi aunque viajara dos veces al año, se veía sorprendido y se disculpaba por preguntar algo así, inmediatamente le aclaré que no tenía que preocuparse, al principio había sido duro y doloroso, pero eso duro hasta llegar a Corea y empezar mi internado, dándome cuenta que quizás en el fondo no lo amaba más que a mi carrera, soltó una risa y empatizaba con el pobre chico por mi forma de pensar.
Me ayudó a lavar los platos y ordenar todo, me abrazó y correspondí su abrazo por largos minutos, esto era algo que siempre extrañaba al no estar con mi familia y amigos, no tener a nadie para entregarme un poco de afecto y ahora tanto Seungri como Vale y Javi comenzaban a llenar un poco el vacío que sentía.