You Got Me Losing My Mind (GD y Tú)

Capítulo 38: Regreso agridulce.

Había sido un turno agitado en el hospital, el clima invernal provocaba estragos tanto para los pacientes como para el personal y las exigencias del último año de internado eran peor de lo que pude imaginar, los horarios apenas nos dejaban dormir e incluso en nuestros descansos los doctores o enfermeras solicitaban respaldo de los internos.
Después de una agitada noche y una mañana caótica llena de pacientes pude tomar mi anhelado descanso, me dirigí hacía una de las habitaciones equipadas para que el personal médico pudiera descansar y me acurruqué en una de las camas.

Estaba profundamente dormida cuando sentí que delicadamente acunaban mi rostro con ambas manos, sin embargo no fui capaz de moverme hasta que sentí un suave roce en mis labios. Al principio me asusté porque nunca imaginé que era GD quién estaba frente a mí, pero en cuanto abrí los ojos y pude reconocer su rostro una inexplicable calma me envolvió por completo e invitablemente correspondí su beso, sin embargo este no duró mucho al darme cuenta y tomar el peso de lo que estaba ocurriendo entre nosotros.

La última vez que vi a GD fue la noche que salimos de fiesta antes de su gira, osea, hace poco más de tres semanas y sinceramente se me habían hecho eternas, era extraño no tenerlo sobre mí persiguiéndome como un cachorrito en busca de afecto y el vacío se hizo más notorio al no tener tiempo para las habituales llamadas telefónicas que nos ayudaban a ser más cercanos de lo que ya éramos, por ese motivo verlo después de tanto tiempo me dejó completamente impactada y sobreraccione al verlo.

Despertar con GD a mi lado provocó que mi corazón se acelerara más de lo normal, el hecho de besarnos dejaba claro que ambos nos habíamos extrañado y necesitado, pero mi torpeza y nerviosismo me jugaban en contra provocando que dijera mis pensamientos en voz alta. Al escucharme decir que pensaba que era un sueño y por eso lo había besado se emocionó rápidamente al deducir que soñar con él era algo habitual, pero por suerte nuestra conversación se vio interrumpida por una interna de quinto año que entró a la habitación para cambiarse de ropa y recoger sus cosas. Sin dudarlo escondí a GD bajo las sábanas para evitar que lo vieran, era un área restringida para personas externas al hospital y si nos descubrían tendría problemas en la universidad y él con la exposición que probablemente sufriría, por lo que no se rehusó a mi rápida decisión.

La chica estaba tan sumergida en su mundo que ni siquiera volteo a ver quien o cuántas personas habían en la habitación, con desgano se cambió de ropa y maquilló sutilmente para cubrir sus ojeras, todo iba perfectamente, pero GD como siempre no hacía las cosas fáciles y bajo las sábanas tiraba mis manos para llamar mi atención, al no hacer lo que quería sus manos se posaron sobre mi cintura y sus dedos se hundieron levemente en ella haciéndome cosquillas, como consecuencia una risa ahogada salió de mi boca llamando la atención de la chica que terminaba de meter sus cosas en un pequeño bolso, me miró un par de segundos y preguntó si estaba bien, ya que me veía un poco sonrojada y creía que podía haber contraído un resfriado, asentí ante lo que decía y respondí que no me había sentido bien durante las últimas horas, me excusé hablando del exceso de horas en el hospital y la falta de sueño, pero ella no sabía que el verdadero motivo de mi sonrojo no era por estar enferma, sino por haber despertado junto a GD y posteriormente tener que ocultarlo bajo las sábanas.
Afortunadamente después de un par de consejos volví a quedar sola junto a GD en la sala de descanso e inmediatamente salió de su escondite para reclamar cuánto había tardado en irse.

GD: ¿Crees que puedas salir antes? Vamos a casa aunque solo sea para dormir, no pienso irme sin ti, han sido muchos días sin verte.

_____: Sabes? Generalmente te ves un tipo rudo, malhumorado y serio, sobre todo cuando asistes a algún programa, pero no lo eres, me sorprende tu ternura y muchas veces puedes llegar a ser tímido con algunas cosas, también te esfuerzas y preocupas por lo que te importa, por eso creo que poco a poco me siento confiada contigo.