Después de un largo rato me dieron de alta. Me entregaron las pertenencias de Damen y una depresión se apoderó de todo mi cuerpo. Justin estaba ahí, como siempre. Mi madre había llamado, pero yo no tuve ánimos de responder, supuse ya estaba aquí en Nueva York, pero Justin me informo que ella pasaría a verme al departamento. Me decepciono, pero entiendo que trabaja y le fue complicado venir antes. Al salir me sentía en conflicto de tener que depender por el momento de la ayuda de un empresario ocupado.
Puso en marcha su auto después de ayudarme cuidadosamente a subir a el. El silencio era incómodo pero se podía entender que por ahora el era necesario. Llegamos a mi departamento, la tristeza lo invadió todo, las cosas estaban tal y como más habíamos dejado antes de salir al viaje. Justin no entro, tan sólo me observaba como yo caminaba por la casa tocando algunas cosas como sí jamás las hubiera visto y pensando en como pudo haber sucedido toda está tragedia. En un momento las cosas parecen color rosa y de pronto me encuentro en un lugar oscuro sin salida y sin futuro aparente. De pronto la voz masculina y ronca de Justin me sacudió de mis pensamientos.
- ¿Quieres comer algo? - pregunto tranquilo, dulce.
- Sólo quiero que te vayas, por favor. Quiero estar sola.
Me gire a verlo, quería estar sola pero a la vez su compañía me hacia tanto bien. Pero estaba en un infierno, la casa estaba llena de recuerdos, pero debía superarlo tarde o temprano o hundirme sí era necesario. Justin se acercó decidido a mi y me tomo en sus brazos, nunca había hecho esto. Me abrazo y sentí como algunas piezas se reconstruyeron dentro de mi." Yo cuidare de ti, voy a estar siempre al pendiente de ti. Te protegeré tal y como Damen lo hubiera hecho".
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Siempre suya, Jefe.
FanfictionUn gran empleo llega a manos de Ashley, gracias a su adorado novio; Damen, un hombre que la ama con todo su corazón, sincero, fiel y sencillo. Pero nunca imagino que le estaba entregando su novia al hombre más posesivo, romántico, misterioso y dueño...