28. ¡Ella es Basura!

1.7K 81 1
                                    

Justin quitó el freno de mano y arranco a toda velocidad. El miedo se apoderó de mi, tenía que por su enfado pudiéramos tener un accidente o lo que fuera a pasar. Tome la mano de Justin tratando de tranquilizarlo.

Justin frena lentamente y se queda observando nuestras manos juntas. Me dedica una sonrisa soñadora y acaricia con su otra mano la mía.

- ¿Estas más tranquilo? - pregunte sin retirar mi mano de las suyas.
- Lo estoy. - respira hondo. - aún así debemos aclarar todo esto, se muy bien que mi padre te dijo todo eso, lo conozco.
- No vale la pena que tengas un disgusto con el, sólo por mi.
- No es sólo eso Ash, es la forma en la que quieren controlar mi vida.

Después de eso no respondí nada más.
Nos adentramos a una casa muy lujosa, una gran rotonda llena de flores separaba la entrada, Justin estaciono el auto y camino hacia la puerta sin esperarme. Camine detrás suyo sin seguirlo hasta donde se encontraba su padre. Justin siguió caminando y yo me quede en el recibidor, de pie.

- ¿Por que diablos le mentiste a Ashley Papá? - pude escuchar a Justin levantando la voz.
- Justin, que bueno que llegas. - lo desconcierta evadiendo su pregunta. - Él es mi gran socio Erick Roberts y ella sí encantadora hija Amber.

Justin:
Al ver a la chica sonriéndome impresionada, estreche su mano y después la de su padre. El mío parecía emocionado. Me sentí avergonzado por haber llegado discutiendo como un idiota. Me disculpe y ellos sólo asintieron.

Mi padre tomo una botella de Whisky y 5 copas. Mi madre sonreía y murmuraba algo en el oído de la chica, a lo cual ella sólo me miraba tratando de llamar mi atención. No podía dejar de estar molesto, mi cara era grosera, no le dedicaba ni una sonrisa a nadie, lo único que quería era aclarar todo esto.

- Bien, es hora de brindar. - dice mi padre repartiendo las copas. - Celebremos el compromiso de Justin y Amber.
- ¿Que mierdas les pasa a todos? ¡No me pienso casar con ella! Ni sí quiera se quien diablos es. - escupí.

Todos se quedaron perplejos, boquiabiertos.

- ¿Es por esto que alejaste a Ashley de mi? Para ganarte un socio más por medio de un estúpido compromiso.
- ¡Ashley no es para ti! Esa chica no es nadie entiende. - se convirtió en una guerra de gritos y escándalo.
- ¿Que no es para mi? Es la chica menos interesada, no como este tipo de gente.
- ¡Ella es basura Justin, basura! - grito mi madre.
- Ustedes son basura.

Salí corriendo de la sala de reuniones de mis padres y al llegar al recibidor Ashley no estaba, salí a toda prisa tratando de alcanzarla.

Ahí estaba a punto de salir por el enorme portón de fierro. Corrí gritando su nombre hasta que se detuvo.

- Ashley... - dije agitado.
- ¿Soy basura? - pregunto cabizbaja y humillada.
- No preciosa, por supuesto que no lo eres. Lo siento tanto nena. - la tomé en mis brazos tan fuerte que no quería dejarla ir.

Siempre suya, Jefe.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora