Ya habían pasado dos semanas desde que perdí a Damen. Las veces que Justin venía lo corría de mi casa, la última vez que vino fue hace tres días. No ha llamado, ni enviado mensajes de texto; supongo que al fin se cansó de mi y se dio cuenta que sólo soy una mujer sola problemática, paranoica y que no vale la pena. Así como hay muchas mujeres más como yo, ¿porque ser yo una excepción?
Era de noche, me había quedado dormida mientras veía una cursi película de amor. De pronto la televisión me despertó con el volumen tan alto en el que estaba. La apague.
- Damen. La luz, te toca. - dije dormida.
Al percatarme de que no hubo respuesta alguna me levanté de la cama. Escuche una melodía y camine hacia la sala, era Damen. Tocando suavemente y despacio su guitarra. Lo abrace inmediatamente por la espalda detrás del respaldo del sofá.
- Damen, ¿dónde has estado? No te he sentido cerca. -dije sin abrir los ojos y acariciando su pecho con mis manos.
- Pero, estoy aquí mi amor. -dijo, tranquilo y paciente como siempre, sin dejar de tocar las cuerdas de su guitarra.
- Amor, no tengo un plan. - me dirigí a acostarme en su regazo.
- Descuida bebé, tus planes nunca funcionan.
- No quiero volver al trabajo
- Es mejor que estar aquí, ¿no? - escuche.
- Es cierto.
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Siempre suya, Jefe.
FanfictionUn gran empleo llega a manos de Ashley, gracias a su adorado novio; Damen, un hombre que la ama con todo su corazón, sincero, fiel y sencillo. Pero nunca imagino que le estaba entregando su novia al hombre más posesivo, romántico, misterioso y dueño...