📖Tesoros en la Biblia [Editando durante el 2022]

Marzo 8

¿Por qué quieren desanimar a los israelitas para que no pasen al país que el Señor les ha dado?

Números 32:7

Desánimo es aquella sensación de abatimiento, apatía, desaliento, falta de ilusión o de ánimo es la que frecuentemente experimentamos cuando por alguna razón no encontramos o no obtenemos lo que queremos. El desánimo nos lleva muchas veces a ver las cosas sin una importancia real, en lo espiritual nos lleva a ya no practicar aquellas cosas que nos fortalecen. Una persona desanimada es una persona que difícilmente buscará orar, es una persona que difícilmente querrá leer la Biblia, es una persona que difícilmente tendrá el ánimo de ir a congregarse y menos de servir a Dios. El desánimo es aquella sensación que quiere privarnos de hacer todo lo que Dios quiere que hagamos. El desánimo a veces es la consecuencia de una frustración, a veces es la consecuencia de una larga espera o simplemente producto de un fracaso en algo que esperábamos triunfar.

Como ven, el desanimo es muy peligroso y por eso Moisés, al escuchar la petición de la tribu de la tribu de Gad y Rubén tuvo miedo y con justa razón: Dos de las 12 tribus querían establecerse fuera de la tierra prometida, del otro lado del Jordán y eso sería un buen motivo para desanimar al pueblo y evitar así el cruce y la conquista de la tierra que Dios les había prometido.

Para felicidad de Moisés, los jefes de las dos tribus se comprometieron a acompañar a sus hermanos a la conquista de Canaán y el asunto se dio por zanjado.

El poderoso Dios de Israel es nuestro Dios. En él podemos confiar, y si obedecemos sus requerimientos, obrará por nosotros tan señaladamente como lo hizo por su antiguo pueblo. Todo el que procure seguir el camino del deber se verá a veces asaltado por la duda e incredulidad. El camino estará a veces tan obstruido por obstáculos aparentemente insuperables, que ello podrá descorazonar a los que cedan al desaliento; pero Dios nos dice: "¡Sigan adelante! Cumplan el deber cueste lo que cueste."

Las dificultades de aspecto tan formidable, que llenan vuestra alma de espanto, se desvanecerán a medida que, confiando humildemente en Dios, avancéis por el sendero de la obediencia.

NO debemos permitirnos ser una excusa para desalentar a los demás.

Tesoro de Números 31-32

Lealtad a Dios es Animar a los demás a Cumplir la Misión