📖Tesoros en la Biblia [Editando durante el 2022]

Abril 10

No tengan miedo. Es cierto que ustedes han hecho muy mal; pero ahora no se aparten del Señor, sino ríndanle culto de todo corazón. 
1° Samuel 12:20 (DHH)

Una de las grandes verdades de nuestra vida es que nunca nos conformamos con loque tenemos y somos. De ahí el refrán que dice: "El pasto siempre parece más verde al otro lado de la cerca". ¿No es cierto? Sí, siempre nos parece así. El pueblo de Dios cayóen este fenómeno al ver que las otras naciones tenían un rey humano paragobernarles. Se olvidaron de todo lo que Dios había hecho por ellos y propusieron alprofeta Samuel la idea de tener un rey para el pueblo. Samuel iba a seguir sirviendo como profeta mientras viviera. Él iba a seguir hablando palabra profética que Dios le revelara, e iba a seguir enseñando al pueblo la Torá. Sin embargo, a partir de ese momento, él tomó un segundo plano en el liderazgo de Israel, pues ya tenían rey. Aun así, Samuel aprovechó el momento para aclararles que la verdadera y máxima autoridad de Israel nunca había sido él, sino el SEÑOR Dios de Israel. 

Cuando una persona hace algún daño o comete un pecado, el propósito de Satanás no es que la persona se detenga a reflexionar, sino que se deje  llevar por la voz del enemigo que le dice: "ya pecó, ya no le queda otra cosa que seguir por el camino equivocado, Dios no le va a perdonar, lo que Dios tenía para darte quedó anulado, ya no cuenta contigo". Entonces la persona en lugar de frenar su carrera lo que hace es acelerar hacia el mal, pero pudo haberlo corregido, pudo haber ido a Dios en busca del perdón, pero no lo hace sino que por lo general tiende a apartarse y a enlodarse en el pecado. Por eso es que Samuel les dice que han hecho mal, pero que a pesar de eso es mejor que elijan no apartarse del Señor, sino que se arrepientan y comiencen a servir a Dios con todo el corazón.

Recordemos que Dios es misericordioso y la Biblia dice: "Si fuéremos infieles, Él permanece fiel" (2 Timoteo 2:13). Dios no es como los hombres, Él cuando perdona olvida nuestra maldad, "sepultará nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos nuestros pecados" (Miqueas 7:19). Si ha fallado a Dios lo mejor es que se detenga, haga un alto en su camino, vuelva arrepentido, y comience a servirle de verdad con sinceridad y de todo su corazón.  

 A Dios hay que servirle de todo nuestro corazón y elegir estar de parte de él, orando tal como lo hizo Samuel:  "Solamente temed a Jehová y servidle de verdad con todo vuestro corazón, pues considerad cuán grandes cosas ha hecho por vosotros"

Tesoro de 1° Samuel 9-12:
Estar de parte de Dios es reconocerlo como nuestro único Rey