Enero 8

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JOB II
"Sed de empatía"

"Ya he oído muchas veces cosas parecidas.
Ustedes, en vez de consolarme, me atormentan."
Job 16:1

El diccionario define empatía como: "la capacidad cognitiva de percibir en un contexto común lo que otro individuo puede sentir". De modo que, para tener empatía, en primer lugar habría que haber vivido algo similar y, en segundo lugar, participar afectivamente en los sentimientos que esas circunstancias específicas provocan en el prójimo. En efecto, la empatía implica, como suelen decir, sentir en nuestro corazón el dolor de otra persona.

La empatía es importantísima para representar a Dios correctamente. En el caso de Job, la clara falta de empatía que sus tres "amigos" manifestaron, fue lo que los convertió en consejeros "miserables". De hecho, Job mismo afirmó qué haría él si los papeles estuvieran invertidos: "Yo les daría palabras de ánimo; intentaría aliviar su dolor." (16.5).
Sé que puede ser difícil aconsejar sabiamente a una persona, pero la falta de una actitud empática a hora de hacerlo, nos va descalificar de inmediato y jamás podremos convertirnos ni en consejeros efectivos, ni en consoladores. Los tres "amigos" de Job no solo no eran empáticos, ¡ellos no querían ser empáticos! La prisa por juzgar y culpar, tira abajo todo propósito constructivo de la consejería y del arte de consolar. ¡Tengamos cuidado!

Algo que también muchas veces obstaculiza la mirada comprensiva,  misericordiosa y la entrega de consuelo, radica en la consideración de que el mismo sujeto ha sido el responsable de su sufrimiento y, por tanto, estaría padeciendo por su propia culpa

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Algo que también muchas veces obstaculiza la mirada comprensiva, misericordiosa y la entrega de consuelo, radica en la consideración de que el mismo sujeto ha sido el responsable de su sufrimiento y, por tanto, estaría padeciendo por su propia culpa. Y aunque vamos a hablar más adelante de cómo esto pudiera ser de algún modo cierto en ocasiones, la misericordia y el consuelo siguen siendo un deber que a nadie puede ser negado, tal como Jesús enseñó. 

Cuando el sufrimiento de otros empieza a hacernos sentir incómodos ¿cómo respondemos? ¿Podemos continuar ofreciendo compasión, incluso empatía, o empezamos a buscar respuestas a preguntas que nos harán sentir mejor? ¿Queremos una razón para poder mirar hacia otro lado, porque nuestra impotencia y tristeza es demasiado difícil de soportar? Recuerda, Si inviertes tu tiempo en juzgar, señalar y ridiculizar a las personas, no tendrás tiempo suficiente entonces para aprender a amarlas tal como Dios desea que lo hagas.

Tesoro de Job 17-20:
Representar a Dios es tener compasión y empatía

📖Tesoros en la Biblia [Editando durante el 2022]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora