Rodeada de sangre (RDC#3)

capitulo 27

Alison POV

No, no, no. No puede hacerme esto. No puede pedirme que me olvide de él. No, no, no. Siento como las órdenes quieren penetrarme en la cabeza pero me resisto.

De repente, siento una mano agarrándome el hombro. Volteo y me encuentro con Ian que intenta apartarme de Adrien. Tironea de mi brazo para que me corra pero no estoy dispuesta a hacerlo. Me aferro a Adrien y de pronto, siento que la mano me suelta. Ian me ha soltado. Pero no. Una descarga eléctrica impacta en mi cintura y me veo obligada a soltar a Adrien por el dolor.

Ian me empuja lejos y mi cuerpo se arrastra por el piso provocando que todos mis músculos queden adoloridos.

Veo que Ian toma a Adrien que apenas opone resistencia y lo tira sobre la camilla.

Intento levantarme pero siento que unas manos me detienen por atrás: Cedric.

-suéltame - intento zafarme de su agarre pero me arrastra para atrás.

- Alison, es mejor que te vayas - me dice Cedric intentando no lastimarme con su fuerza - es por tu bien.

-¿desde cuando te importa a tí y a Ian lo que me hace bien? - espeto y lanzo un codazo que golpea el aire.

- nos importa más de lo que piensas, Alison. Te lo explicaría pero tienes que irte ahora.

- ¡si les importara no matarían a Adrien!

Me concentro en Adrien. Ian lo tiene acorralado contra la camilla y tiene la aguja en la mano.

Veo como Adrien intenta contraerse pero le es inútil no tiene escapatoria.
Oigo un ruido a mis espaldas. Y claramente no es Cedric.

-¡Alison! ¡Adrien! - grita una voz que reconozco al instante: Madison. Y no está sola. Hay varios vampiros junto a ella.

Noto como su atención se desvía a Adrien. Yo hago lo mismo e intento con todas mis fuerzas empujar a Cedric. Y lo logro. Corro hasta Adrien pero cuando estoy a un metro de distancia, Ian le entierra la aguja en el cuello a Adrien que ahoga un grito de  dolor.

-NOOOOOO - siento como si garganta fuera a desgarrarse en cualquier momento.

Me tiro a lado de Adrien que está tendido en el piso.

-resiste Adrien por favor. No puedes dejarme por favor...

-Alison... - me interrumpe - yo... promét... eme... - no puede decir muchas palabras juntas - t-t-te... amo.

-resiste por favor. Te lo ruego. No te vayas. Por favor.

-Alison...

Noto como quiere decir algo pero la voz no logra salir de su boca. O quizá es que está susurrando y no puedo escucharlo. Decido acercar mi oido a sus labios para intentar comprender lo que dice. Pero justo cuando hago eso, me toma la cara con sus débiles manos y me coloca justo frente a él. Con un esfuerzo enorme, acerca sus labios y los presiona contra los míos.
Pero, de pronto, sus labios se vuelven más frios. Me aparto y lo observo. Está muy pálido. Pero por sobre todo, está muerto...