La Propuesta

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-¡Esto es demasiado!- gritó Seung.

-¡Por eso mismo estamos haciendo esto!- contesté.

-Tiene razón, Seung.- agregó Ji Yong.

-¿Estás de su lado? ¡Me van a matar!

Ji Yong y yo nos miramos y suspiramos al unísono.

-Tu estado como escritor no te permite tener una buena condición física y eso perjudica tu salud, Seung.- dije acercándome para poner sus rostro sudado entre mis manos.

-Pero tú y yo podemos hacer otro tipo de... Actividad física.- dijo con una voz seductora y sentí que esa mirada llena de deseo me prendía por dentro.

Iba a besarlo pero antes fui interrumpido.

-Ji Yong presente.- dijo el hermano de Seung.

-Tú cállate.- gruñó el mayor de los Lee.

-Oblígame con un besito.- paro sus labios para recibir el beso y yo no pude evitar reírme y de ahí me siguió Ji Yong.

-¿Desde cuándo ustedes dos se volvieron tan unidos?

-Muchas cosas pasan cuando te desapareces sin decir nada.- repliqué.

-Vamos, vamos- dijo Ji Yong haciendo pequeños trotes.- Aunque Phichit sea un deportista se ha estado descuidando desde hace un tiempo, ¿no es así?

-Pero yo...

-Pero nada.

-Ahora comprenderás mi sufrimiento.- bromeó Seung.

Y así los dos corrimos tras nuestro "entrenador" (así quizo que lo llamáramos) Ji Yong.




-Sí que no aguantas nada.- dijo el hermano de Seung.

-Cállate...- a penas pudo contestar.

Me empecé a reír pero la mirada de Ji Yong me interrumpió.

-Tú no eres diferente, estás a nada de estar como él.- señaló a su hermano medio moribundo de cansancio y después suspiro.- Estaré aquí mañana temprano, esto no ha terminado.

-Espera... Ji Yong... ¿Dónde te estás quedando?- preguntó Seung a duras penas.

-En la casa de un amigo, nos vemos.- y así se fue.

-¿Por qué el interés?- le pregunté a Seung.

-Desde que regresamos a Corea del Sur él se estuvo quedando aquí, pero cuando llegaste ahora sólo pasa a visitar y según parece ser que será nuestro verdugo a partir de ahora.

Reímos por un rato. Sin duda estamos condenados.

Pero una de mis inquietudes comenzó a martillear dentro de mi.

-Seung.

-¿Qué ocurre?- preguntó acostándose sobre mi agarrado de mí cintura y posando su cabeza en mi pecho.

-Quiero preguntarte algo.- empecé a acariciar sus negros cabellos.

-¿Qué es?

Por alguna razón me costaba fórmulas las palabras correctas. Aún así lo hice.

-¿Qué somos?

-¿Cómo?- alzó su cabeza para verme.

-Sí, tú y yo, ¿qué somos?- aclaré.

-¿Qué pregunta es esa? Está claro que somos...- quedo boquiabierta y no dijo más.

Claro, nunca dijiste las palabras correctas. Y yo tampoco.

-Phichit Chulanont- se levanto e hizo que yo también lo hiciera tomándome de las manos.

-¿Sí, Seung-Gil Lee?

Él se arrodilló frente a mí viéndome desde abajo.

¡No puede ser!

-Phichit Chulanont- se veía ligeramente nervioso pero la decisión estaba marcada en sus ojos.- ¿me darías el honor de ser tu novio a partir de hoy, hasta nuestros próximos días que serán incontables?

Este chico que me mira con unos tiernos ojos suplicando una respuesta, se pone en una posición cómo si fuera a pedirme matrimonio...

-No.- contesté serio.

Al instante, el rostro de Seung se marcó con mucha desilusión para después bajar su su mirada completamente confundido; volvió a dirigir sus ojos hacia mi queriendo decir algo pero lo interrumpí con un beso.

-Estaba jugando, amor - lo mire a los ojos y se veía más tranquilo.- ¿En serio crees que te diría que no después de todo lo que hemos pasado?

-Bueno, yo...

-Sí, Seung-Gil Lee. Quiero estar a tu lado a partir de hoy hasta nuestros días incontables.

Me coloqué sobre él y él se sentó en el suelo. Puse mis labios sobre los suyos y conecte a besarlo frenéticamente. Seung se aferró a mis caderas y yo a su cuello.

-Hace días que no tenemos nuestra "actividad física"- dije con cierto tono seductor.

-Me estás volviendo loco.

Durante el beso, Seung me tomo de mis muslos y me alzo junto con él. Me sorprende cómo puede llegar a tener tanta fuerza y resistencia siendo él tan sedentario. 

-Hay tantas cosas que quiero hacer contigo, Phichit Chulanont.

Mi mente voló con esas lascivas palabras.

-Estoy a tu merced así que, Seung-Gil Lee, por favor, cuida de mi.

Una sonrisa ladeada se posó en su rostro.

Claro que tenemos muchas cosas que hacer.

Quiero satisfacer a este hombre y que él también lo haga conmigo.

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Perdón si lo dejo así xd mi celular se va a descargar y no quiero faltar con el capítulo de hoy

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Nunca lo olviden 💙〰〰〰〰〰〰

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Nunca lo olviden 💙
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Oscûlum (Seung-Gil x Phichit)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora