Capítulo 5

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Narra Blade

El domingo transcurrió muy aburrido para mi gusto, pero hoy lunes esperaba que todo fuera diferente.
Me alisté para las clases con un atuendo más común que lo común, así me sentía más cómoda. Sin llamar la atención, ser alguien invisible y pasar desapercibida siempre.
Nina, en cambio se vistió con un hermoso pantalón de vestir y una blusa con líneas verticales muy colorida, que por cierto era traslapada lo que le daba un tono más femenino, y se colocó unas zapatillas a juego.
Éramos tan diferentes que encajábamos a la perfección. Por algo somos mejores amigas, ¿no?
Ya en el instituto todo transcurrió normal, pero en la hora del almuerzo le comenté a Nina mi plan-dominguero.

Seee, esa será mi nueva palabra.
"Añadida al diccionario de Blade".

-Mira, para continuar con las notas de Jack, creo que me vendría mejor que tú le entregaras algunas en clase de historia, así le sería más difícil dar con mi identidad. Tú sabes.

-¿Que yo qué? Estás quedando tolete si crees que seré parte de esto. ¿Sabes lo peligroso que es? Bien dice un dicho: "las paredes hablan y las puertas escuchan". Cualquiera podría darse cuenta y esto me saldría caro.

-Vamos, Nina. Hazlo por tu amada mejor amiga. - le hice ojitos de borrego y bateé las pestañas en forma de abanico. - Por fiiii.

Necesitaba su ayuda, no podría en esto sola.
Sí, lo sé. Yo sola me metí en esto, pero ¿acaso no sería sospechoso que siempre le entregara las notas luego de la clase de gimnasia?
Obvio que este chico no es tonto, y esto me delataría a mil.

-¡Bien, está bien! Solo no me mires así que me siento incómoda.

Me carcajeé por sus palabras y la abracé. En serio valoraba su atrevimiento y tenacidad en este momento.

Me sentí bien al contar con la ayuda de Nina en este asunto. Por eso la quería tanto, ella aún sabiendo mis descabelladas ideas me apoyaba.

El resto de las clases pasó con rapidez, adoraba los números así que en un zas se me pasaron las 3 últimas horas de matemática.
Ya en la salida busqué a Nina con la mirada y la encontré con su chico apoyados en el auto de este. Le sonreí levemente y me acerqué a ellos.

-¡Hey!

-Hola, Nico. ¿Cómo estás?

-Bien, disfrutando del tiempo junto a mi hermosa novia. - Justo al decir esas palabras mi mejor amiga se sonrojó levemente y le abrazó con ternura.

-Bien, Romeo. Me empalagaré de tanta azúcar si no paras. - dije levantando mi mami para que parara en son de broma.

-Bien, chica. Pero en cuanto te enamores entenderás que las acciones cursis serán parte de ti cada que estés cerca de quien amas.

-¿Yo? ¿Enamorarme? Deja de bromear, chico. - le apunté burlándome. - El amor no está hecho para personas como yo. Es mejor que los tenga reservados en los libros y en mis series, ellos me amarán toda la vida y no me lastimarán nunca.

-Es un buen punto, pero cuando el amor llega a tu puerta no puedes detenerlo, inocente Blade. Es ley de la vida, solo te queda aceptar y abrazar la idea. - dijo Nina con palabras sabias.

-Ay, chico romántico, ¿qué le hiciste a mi amiga?

-Ja Ja, buen chiste. - Nina aleteó sus manos y se puso seria. - Bueno ..., cambiando de tema, Nicolás y yo iremos ahora por una pizza, ¿quieres unirte?

No Te Enamores De Jack. ©  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora