Capitulo 11

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Narra Jack

Decido estacionarme en un parque que está a medio camino de casa, bajo de la moto y me siento en una banca que se encuentra alejada del centro. 
Abro el sobre y desdoblo el papel, doy un sonoro suspiro y la leo.
...

No puedo evitar sentir curiosidad sobre sus palabras: ¿Acaso conozco yo esta chica?¿Por qué sabe tanto?¿Cómo sabe que me gusta el color negro? ¿Quién es?¿Qué cosas conoce de mí?

Caramba, ¿acaso quiere volverme loco de la intriga? 

Me caracterizaba por tener poca paciencia, así que si esta chica quiere guerra, la tendrá. 
He recogido algunos detalles que me ayudarán a saber quién es. Saco una libreta y empiezo “mi lista”.

1) Es compañera mía en alguna clase, pues no hay otra razón para que sepa que dejo mi mochila sola durante la clase de gimnasia, y eso solo por evitarme la fatiga. 
2) Es del grupo de marginados, ya ella mencionó que era alguien invisible. 
3) Ella solo conoce a este Jack, este episodio en donde salgo con chicas e irrito a otros. 
4) Le gusta el color negro y sabe que a mí también me gusta. 
5) Al parecer me observa a distancia, una vez mencionó que me aludió diciendo que el color azul, cosa que ya sabía. 
6)... 

Esa está pendiente, tengo que saber quién es ella. Sé muy bien que me llevará bastante tiempo encontrarla, con tantos estudiantes y con características tan generales de ella, pero igual no me rendiré. No puede ser imposible, ¿o sí? 

Necesitaba aclararme con todo pero primero debía esclarecer mi mente, tenía tantas cosas preocupándome que me resultaba forzoso.
Tomé una gran bocanada de aire y decidí poner el tema de la maniática en segundo plano, es cierto que me tenía con pica no saber quién es pero, hay asuntos que son primordiales y no quería dejarlos al margen por unas simples notas. 

Decidí que ya era hora de irme, sino preocuparía a mamá y papá porque no esperaban a que llegara tarde. Me monté en la moto y conduje por el camino. 
Al llegar a casa noté un atisbo de preocupación el rostro de ellos, y sabía que era por llegar tarde. 

-¿Dónde estabas? - dijo papá en un tono algo molesto. A su lado estaba mamá

-Lo siento, no era mi intención.  - sabía que estaban preocupados, siempre tuvieron miedo de que pudiera suceder un accidente. Los entendía y por ello me sentía mal. 

-Nos tenías preocupados, sabes que hay cosas imprevistas siempre, podría sucederte cualquier cosa. Tienes que avisarnos, Jack. - prosiguió el. 

-En serio lo siento, prometo no hacerlo de nuevo. Solo ocupaba esclarecer mi mente un poco.

La expresión de ambos cambió, se les desencajó el rostro y juntaron las cejas aún más empáticos por mis palabras. 

-¿Qué tienes, hijo? - se adelantó mamá. 

-Nada malo, solo cosas sin importancia. - mentí porque sí lo era. 

-¿Seguro? - dijeron los dos al unísono 

-Por supuesto. Cambiando de tema, ¿qué hay para cenar? Es tengo un hambre que me comería un elefante. 

-Bien, ahora les sirvo a todos. 

-Yo traeré a Delany. - dije y huí de ahí. 

Estaba avergonzado con ambos, y aunque se relajaron luego no podía quitarme la carga de conciencia al haberles mentido, pero decirles que todavía dudaba sobre lo que estudiaría en la universidad los pondría mal ya que tenían altas expectativas en mí y faltaba poco menos de un semestre para la graduación. 
Estaba sumido en mis pensamientos y veo la figurita de mi hermana asomándose por el pasillo. 

-¡Hola, enana! - digo y sus ojos de se tornaron brillantes y de sus labios brota una linda sonrisa. 

Ella es la niña de mis ojos, realmente la amo. Su sola presencia en un momento como este me tranquilizó y me hizo sentirme bien. Ella tiene una personalidad chisposa, es alegre y muy tierna. Cómo no quererla. 

-¡Jack! - ella corre hacia mí y se lanza sobre mis brazos y la abrazo. 

-Hola, nena. Vengo por ti porque ya está lista la cena. 

-Sí, vamos que tengo hambre. - dijo mientras se tocaba la barriga. 

Sonreí con ternura y con ella aún enroscada en mi cuello decidí bajar. Ella saluda enérgicamente y la dejo caer sobre su silla. 

Todos hablamos un buen rato. Papá estaba súper alegre contando anécdotas de su trabajo, mamá no paraba de reír y ver con cariño a papá de soslayo. Delany también contó lo que hizo hoy en clases y yo solo me limité a escuchar y sentirme afortunado de estar en casa y disfrutar de tiempo con mi familia. 




^3^

Bueno, aquí les dejo otro capítulo. 

No sé ustedes pero yo amo a Jack *le empiezan a tirar tomates* 
Sí, lo sé, hay cosas que hace mal, pero es humano, ¿acaso no merece otra oportunidad? *todos la miran mal*. 
Weeeeno, weeno, ya verán que Jack-Sexy-Daniels se ganará sus corazones *sonríen complacid@s*

Gracias por todo. Hasta la próxima. 

No Te Enamores De Jack. ©  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora