1988
-¿Quieres hablar de lo que ha ocurrido? – Preguntó de repente Jack, rompiendo el silencio que se había asentado en el coche desde hacía un buen rato.
Devi, que hasta ese momento había permanecido con la mirada perdida en la carretera que pasaba a toda velocidad al otro lado de la ventanilla con la barbilla sobre la mano, giró de repente el rostro, sobresaltada. Se abrigó más con la chaqueta que Jack le había prestado y observó que el joven, aunque no apartaba la mirada de la carretera, mostraba una expresión melancólica y, sin duda, preocupada. Al ver que mantenía tan solo una mano sobre el volante, Devi alcanzó la que tenía libre y entrelazó sus dedos con los de él, gesto al que él respondió con un ligero apretón que, sin duda, le enfundó fuerzas a Devi.
Entonces, soltó un suspiro y finalmente, sintiendo cómo aquellas palabras parecían arderle en la garganta, le contó a Jack lo sucedido (obviamente, sin mencionar el momento en el que había besado a Phil; sinceramente, no tenía ganas de tentar a la suerte y arriesgarse a ver cuál era la reacción de Jack), lo que la ayudó a distraerse de esos pensamientos que no podían dejar de preguntarse a dónde la estaría llevando Jack.
A medida que narraba los hechos de aquella fatídica noche, veía cómo el rostro de Jack, que por lo general sabía ocultar perfectamente sus pensamientos, pasaba por todo tipo de emociones. Devi sabía que Jack era una persona que no dejaba mostrar sus sentimientos y que prácticamente siempre guardaba sus emociones en una caja con candado, y no pudo evitar sentirse emocionada al comprobar que, con ella, el joven no tenía ningún reparo en mostrarse como un libro abierto en su presencia. Habían llegado a ese punto de su relación en los que los unían unos hilos tan íntimos que sentían que podían mostrarle el uno a la otra cualquier cosa, ser su verdadero yo y, sobretodo, no ocultar nada.
Y por ello, Jack no tuvo reparos en mostrar primero sorpresa, luego estupefacción, solo para entonces pasar a mostrar una mirada ensombrecida, disgustada y terriblemente airada, pero aquello se esfumó de su rostro en cuanto a Devi le tembló a la voz, lo que le hizo lanzarle una rápida mirada con una expresión de profundo dolor.
-Y supongo que eso ha sido todo. – Termina Devi, negando levemente con la cabeza. – Después me he escapado por la ventana, así que por eso tengo estas pintas tan horribles. Solo hay que verme.
-Pues yo creo que las ramitas y las hojas en el pelo te dan un toque muy distinguido. – Bromeó Jack, tratando de animar a Devi, cosa que sin duda consiguió, pues Devi se echó a reír y, acto seguido, trató de apartarse de sus mechones las últimas hojas que pudiese tener enganchadas. Al ver a Devi reír, Jack sintió como si el mismo sol hubiese proyectado sus rayos en su pecho, y unas ya conocidas mariposas comenzaron a aporrear las paredes de su estómago. – Además, las Converse con el vestido roto son una gran combinación.
Devi estalló en carcajadas y le dio un ligero empujoncito a Jack, que esbozó una amplia sonrisa.
-Gracias por tus consejos de moda, Versace. Estoy segura de que esto va a ser la nueva tendencia de la moda. – Repuso Devi, pícara, sin duda mucho más animada ahora. Daba igual lo que hubiese ocurrido, y lo malo que fuese; Jack siempre conseguía sacar lo mejor de ella, siempre sabía cómo hacerla reír y cómo hacer que las cosas no pareciesen tan negras.
Sin embargo, sintiendo que aquel desagradable hueco negro de su pecho seguía palpitando con fuerza, soltó un suspiro desanimado y masculló:
-Mi padre siempre intenta cortarme las alas. Y cuanto más trato de volar, más empeño pone él en impedírmelo. Cada día que pasa me cuesta cada vez más: fingir ser alguien que no soy, ponerme esa máscara que todos quieren ver y complacerlos a todos. Y en el momento en el que trato de salirme de los moldes... - Negó levemente con la cabeza. – Esto es lo que ocurre. – Se pasó las manos por el rostro y soltó un suspiro. – El único consuelo que me queda es que podré marcharme de este agujero cuando me vaya a la Universidad, aunque para hacerlo tenga que condenarme a estudiar y trabajar en algo que no me gusta. Cualquier cosa con tal de poder perder de vista a este pueblo y a sus habitantes de mierda cuanto antes.

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Warrior | l. t. |
Fanfiction~Falling in love can be a dangerous game ~ ❝ En un pueblo donde los secretos, el pasado y la venganza son protagonistas, tres parejas, en tres generaciones distintas, jugaron con fuego cuando no debían. Y al final, todas terminaron quemándose ❞