51. Agresivo y romántico

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Debía ser de madrugada, JB despertó con Bambam a su lado, pero él estaba despierto con el móvil encendido. Le estaba dando la espalda y tenía el volumen quitado, pero al parecer era un vídeo. Se acercó para mirar mejor y para su sorpresa era un vídeo porno. El tailandés se giró para mirarlo asustado y guardó el móvil debajo de las sábanas. Estaban muy pegados y a oscuras, pero podían verse a través de la luz de la luna.

-¿Estabas viendo porno? –preguntó el modelo.

-¿Mm? Bueno, sí. ¿Por qué?

-No se... No pensaba que fueras a ver porno. Además durmiendo conmigo que te podía ver...

-¿Y qué hay de malo en que me pilles? Es que tú eres muy lento –se quejó el estilista.

JB encendió la luz y se sentó en la cama para poder mirarlo, estaba alucinando.

-¿Cómo que soy muy lento?

-Que sí, que mi cuerpo necesita muchas cosas que tú no le das. Pues me las tendré que dar yo solo.

-¿Pero...?

-Pero nada, ahora no voy a hablar contigo de esto –dijo Bambam poniéndose de rodillas en la cama, se desarropó por completo y se señaló la erección que tenía. –Ahora me tengo que encargar de esto y como veo que tú te seguirás tomando un tiempo mejor me voy al baño.

Cuando se disponía a irse el modelo lo agarró de la mano tirando de él para volverlo a poner sobre la cama.

-Yo te ayudo, yo te ayudo...

-Pues deprisita –le dijo Bambam.

JB lo primero que hizo fue quitarle los calzoncillos. Dejó que se acomodara en el medio de la cama y lo miró, tenía la piel ardiente.

-Vamos... chúpamela...

No solía aceptar ordenes de nadie, pero cómo le iba a decir que no cuando veía lo tieso que tenía el miembro. Se acercó sin dudarlo un momento y empezó a lamerlo. No pudo hacerlo durante mucho tiempo porque el estilista ya estaba moviendo las caderas pidiendo otra cosa. Sí, lo hizo, se lo metió en la boca mientras el menor embestía su garganta dejando escapar gemidos. Aquellos ruidos eran como poco, sensuales, pero era lo mínimo que se le podían denominar, parecía doblador de películas porno.

JB aumentó su ego, si le hacía gemir así debía ser muy bueno chupándola. O no. Bambam lo agarró del pelo y tiró de él hacia arriba para que apartara su boca. Lo miró confundido y el menor se sentó en la cama.

-Métemela...

El modelo estaba sorprendido, realmente no se imaginaba que la primera vez con él fuera así pero asintió obediente y se quitó los calzoncillos. Parecía que el estilista entendía bastante de sexo y le iba a preguntar por la posición pero no le dio tiempo a alzar la voz. Bambam lo empujó para que quedase tumbado boca arriba. Ni un dedo, ni dos. Se sentó encima de su miembro y el mismo decidió como y cuando iba a ser penetrado.

Era un show. El tailandés se tocaba el cuerpo gimiendo mientras saltaba sobre su miembro.

Entonces Bambam despertó, asustado, había tenía sueños sucios pero no tan tajantes, parecía que JB era su esclavo sexual más que su amante. Estaba entrando algo de luz solar por la ventana, debía ser temprano. Cerró los ojos para intentar calmarse. JB seguía dormido así que no quiso moverse para no despertarlo, quería que su erección bajase antes de que él despertara. Simplemente se hizo el dormido.

Pero JB y su mente no se alejaron mucho de aquello.

Estaban en el sofá del penthouse viendo aquella serie del japonés gay. Tuvieron la genial idea de buscar en Smart tv algún video de aquella pareja y apareció uno donde se dedicaban a echarse crema gimiendo, aquello trajo algunos recuerdos.

Let me (GOT7)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora