Narra Alastair:
Una tarde cualquiera de verano, los dos estábamos estudiando en el salón tranquilamente. Con las ventanas abiertas y bebiendo limonada fría con mucho hielo. Los dos nos habíamos matriculado en nuestras universidades. Como ella me aconsejó estaba estudiando magisterio, y me especializaría en la enseñanza secundaria, y Emily estaba estudiando enfermería. Esas tardes solían ser de completamente silencio, solo se podía escuchar el sonido que hacíamos cuando pasábamos las páginas de nuestros libros, o los bolígrafo escribiendo apuntes y notas, en libretas y folios. Roger entraba al salón con comida o bebido de vez en cuando, dejaba la bandeja sobre la mesa y se iba en silencio. No empezábamos hasta Septiembre, y todavía era Julio, así que teníamos dos meses muy largos por delante de estudio intensivo.
-Señor. -La puerta se abrió y Roger entró con una carta en las manos. -Una carta certificada. -Dejé el libro sobre la mesa y cogí la carta, la abrí, le eché un vistazo rápido y llamé enseguida la atención de Emily.
-Emily, escucha.
-¿Hum? -Levantó la cabeza del libro y me miró. -¿Qué pasa?
-Buenas noticias. -Le entregué la carta y mientras leí me fijé en su reacción de sorpresa.
-¿De verdad ha...? Es su firma... -Era la demanda de divorcio que envié hace meses, se ha tardado más de lo que esperaba, pero aquí está...firmada por él. -¿Esto significa que ya...?
-Nos podemos casar, solo hay que entregar esto y ya no habrá ningún obstáculo más. -Dejó caer su libro al suelo y se tiró encima de mí con mucha alegría.
-¡Nos vamos a casar!
-¿Debería traer champán para que lo celebréis? -Preguntó Roger con una sonrisa.
-Mejor tráenos dos cafés, vamos a estar mucho más ocupados ahora.
-¿Deberíamos llamar a una Wedding Planner?
-No sé porque no tenemos ahora mismo el ordenador para buscar una.
-Iré a por mi teléfono.
-Yo a por el ordenador. -Nos levantamos corriendo y cada uno fuimos en una dirección distinta a buscar las cosas.
-¿Pasó algo? -Los cinco trabajadores que había en la casa se reunieron para hablar sobre los
-A esta hora siempre hay silencio, ¿que ocurre?
-Parece que nos vamos de boda.
-¿Qué hacéis que no estáis trabajando? -Roger entró en la cocina y todos se asustaron.
-Nada... Oye Sofía, ¿no te tocaba limpiar el baño de la habitación principal?
-Ah sí, Margaret ayúdame.
-Liam, tenemos que comprar la comida para al cena de esta noche, vamos.
-Voy con vosotros. -Todos enseguida se fueron y Roger se llevó las manos a la cabeza.
-Estos humanos... son demasiado cotillas.
Al día siguiente vino a nuestra casa una mujer acompañada de una ayudante. La mujer llevaba un maletín y la otra chica llevaba varias carpetas en la mano, parecía más un animal de carga que una compañera de trabajo. Estábamos los cuatro en el salón, Emily y yo sentados en el sofá y las dos en el sofá de que habría enfrente.
-Bien, yo soy Catarina y ella es mi ayudante Jessica, y vosotros debéis de ser Emily y Alastair, ¿verdad?
-Sí.
-Es raro ver gente joven casarse, pero nosotras estamos aquí para hacer la boda de vuestros sueños. -¿Jóvenes? Si debemos tener más edad que vosotras dos. -Bueno...¿Como sería vuestra boda perfecta? -Nos miramos entre nosotros y respondí yo.

ESTÁS LEYENDO
Mi Pequeña Mate
WerewolfSin más un día, Elliot salió corriendo de una reunión de trabajo, para ir hacia el hospital donde le espera la mayor sorpresa de su vida. Una niña recién nacida que cambiará su vida a partir de ahora. La vida de Emily se volverá una completa locura...