Narra Emily:
Aquella mujer me trajo comida y otras cosas. Ropa nueva de color negro, un pantalón corto y una camiseta. Parecía ropa de preso mira por donde lo mire.
-¿Qué es esto?
-Solo es por seguridad, es un collar de rastreo para saber dónde estás. -Me lo puso y me quitó la cadena del cuello. -Así no tendrás que estar arrastrando esta molesta cadena. Está hecho del mismo material, así que no se puede romper. Ven, te acompañaré a tu nueva habitación.
-¿Habitación?¿Una de esas celdas?
-Por supuesto que no, ya lo verás. -La seguí por el pasillo y me fijé en todo lo que había a mi alrededor. No olía a lobos ni olía a Alastair, él debe de estar lejos. Abrió una puerta y entré yo primera, era una habitación limpia con una cama, mantas, una mesa y un sofá. -Aquí tienes todo lo que necesitas, y esa puerta de ahí lleva al baño.
-¿Puedo ver a los demás?
-Más tarde, ahora descansa.
Cerró la puerta con llave, no se fiaba de mí. Miré el baño y allí habías una caja con un par de cosas de chicas, toallas limpias y un cepillo de dientes. Todo normal... Si no fuera porque vestía esta ropa y tenía un collar de perro el cuello. No tenía hambre y tampoco estaba cansada, al menos ya no tenías cadenas y podía caminar libremente, pero este collar rastreaba mi posición por lo que no podré moverme demasiado sin que ellos no sepan en dónde estoy.
¿Alastair habrá salido? Seguro que con su fuerza e inteligencia habrá conseguido manipular a alguien y escapar, no sé... Ahora mismo no estoy segura de que significa él para mí. Después de lo que dijo no podía evitar odiarle y sentirme traicionada. No quiero pasarme aquí encerrada el resto de mi vida, voy a salir como sea. Escaparme es mi mejor cualidad, es momento de volver a ser la yo de antes.
Narra Alastair:
-¿Qué pasa con los que causan demasiados problemas?
-Normalmente no vuelven a aparecer, y si aparecen no son los mismos. Algo pasa cuando se los llevan, como si los volvieran loco.
-Esa marca que tienes en el cuello.
-El primer día intenté matar a un guardia, después aprendí la lección y me di cuenta de que estos collares sirven para algo así. ¿Y la tuya del ojo?
-Una pelea con mi pareja. Por este pasillo tampoco huelo nada, debieron de llevársela lejos.
-Normalmente Irina lleva a los suyos a la zona Oeste.
-¿A los suyos?¿A qué te refieres?
-A los lobos que le interesan y los que son más obedientes y sobretodo los mejores.
-Es una mujer, tal vez si logro seducirla.
-¿Piensas acercarte a la humana?
-No me supondrá ninguna dificultad, ¿dónde la puedo encontrar?
-Suele estar en el gimnasio monitoreando las pruebas que se les hacen a algunos. Y tú por ser nuevo deberías estar allí.
-¿Me llevas hasta ella?
-Claro, vamos. Si eso hace que podamos escapar en un futuro te ayudaré todo lo que pueda.
Me llevó hasta una sala con un par de máquinas, donde había varios guardas y médicos vigilando a unos tipos como nosotros haciendo diferentes pruebas, físicas y médicas. Nos querían tener totalmente controlados por lo que veo. Saber nuestra agilidad, rapidez, fuerza...todo. Y entonces la vi, una mujer con cabello castaño, sosteniendo un portafolios y apuntando algo.

ESTÁS LEYENDO
Mi Pequeña Mate
Lupi mannariSin más un día, Elliot salió corriendo de una reunión de trabajo, para ir hacia el hospital donde le espera la mayor sorpresa de su vida. Una niña recién nacida que cambiará su vida a partir de ahora. La vida de Emily se volverá una completa locura...