Espero les guste :) Quiero ver muchos comentarios en este capítulo porque mañana empieza el Maratón e.e (estare revisando los comentarios)
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Busco un encendedor en uno de mis cajones. Cuando por fin lo encuentro, saco un cigarro de una cajetilla y lo enciendo. Lo coloco en mi boca, me recargo en mi cómodo sillón y subo los pies en el escritorio.
Soplo, y admiro como sale humo de mi boca. Hacía tanto que no fumaba un cigarrillo. En realidad, no son muy de mi agrado, pero creo que lo necesitaba.
Abro una carpeta de color amarillo, y comienzo a leer unas cosas nuevas que he investigado sobre Walter Peters. Fantástico, tengo todo para matarlo yo solo.
La puerta se abre, veo entrar a Steven con una gran sonrisa. Se sienta frente a mí y aplaude.
-Viniste –dice.
-Sí –no se entiende con claridad lo que digo a causa del cigarrillo.
-Tenía mucho que no te aparecías por acá.
Saco el cigarrillo de mi boca y lo miro.
-Ya estoy aquí ¿estás contento?
-Vaya, vaya, oficial. Estás algo tenso.
-No lo estoy. –Le arrojo la carpeta- Mira eso.
-Información - la toma entre sus manos y la abre. Le da vueltas a las hojas. – Increíble. Me haces feliz, Cameron.
-No vuelvas a repetir eso.
Bajo los pies del escritorio y me siento correctamente. Mi cigarrillo está a punto de terminarse, así que tomo otro y lo enciendo. El viejo lo dejo en el cenicero.
-Fumando ¿ah?
-¿Tienes algún problema con eso?
-Para nada. Aunque… tú fumas sólo cuando te sientes…, triste, o presionado. –Resopla- ¿Qué ha pasado, Cameron? Cuéntame, hermano.
-No te comprendo. No me ha pasado nada nuevo.
Claro que ha pasado, humillé a _____.
-¿No tienes nada nuevo que contarme?
Recargo mi cabeza en los nudillos de mi mano izquierda, mientras que con la otra sostengo el cigarrillo. Doy un suspiro, y más humo sale de mi boca.
Creo que sí tengo algo nuevo que contarle. ______ estuvo a punto de descubrirme, seguro Steven tiene algo que ver en esto.
Dejo el cigarro en el cenicero y recargo mis manos en el escritorio.
-Ahora que lo pienso… Sí, hay algo nuevo. –me levanto y me dirijo a él. Me mira con la ceja arqueada.- Hace unos días… _____ descubrió que yo hablaba contigo –camino de un lado a otro- Mi pregunta es ¿cómo lo supo? –Lo miro y me detengo- Tú debes saber algo.
Coloca sus dedos en la barbilla y la acaricia, como si pensara en algo.
-_____ ¿ah? Ella… -suspira- Tuve el honor de conocerla.
Lo último que dice provoca que me detenga. Me acerco lentamente a él, y lo miro con enfado. ¿Qué ha querido decir?
-¿Conocerla?
-Así es, Cameron. Ella es hermosa.
-¿Dónde la encontraste?
-En un bar.
Recuerdo el día que llegó ebria, seguro fue esa vez. Camino hasta mi sillón. No me siento, me quedo parado con las manos recargadas en el escritorio. Le doy un golpe que sobresalta a Steven.
-¡Eres un estúpido! –exclamo.
-¿Estás celoso?
-No. ¿Acaso no comprendes lo peligroso que es? ¡Casi me descubre!
-Tranquilo, Cameron… no hablamos de eso. Pero ella si me habló de ti.
Respiro un poco y me siento. Tomo mi cigarrillo, para volver a fumarlo. Miro a Steven con curiosidad.
-¿Qué hablaron de mi?
-Me contó que la habías hecho pedazos.
-Sí, lo hice.
-Me contó lo idiota que eres, creo que te odia demasiado.
-No lo dudo. –Sonrío- Eso es lo que querías ¿no es así? Querías que me alejara de ella.
-Por supuesto…, me alegra que me obedezcas.
Levanto la cabeza, y miro el techo, mientras término un tercer cigarrillo. A este paso acabaré con la cajetilla completa.
-¿Aún sientes algo por ella? –me pregunta Steven.
Me siento correctamente y lo miro. Le respondo de la misma manera que lo hago con ______. Respondiendo una pregunta, con otra.
-¿Eso te importa?
-No…, es decir, un poco.
-¿Sabes, Steven? Hay veces en las que pareces mi madre.
-Como sea –agita la cabeza y luego se levanta- Gracias por la información- agita la carpeta- Sigue así.
-Lo haré, jefe.
-Hay veces en las que tú pareces mi jefe. –ríe.
Da media vuelta y abre la puerta, para luego salir sin voltear a verme de nuevo. Rasco mi nuca y observo una de las fotos de _______ que tengo en mi escritorio. La tomo entre mis manos y la veo detenidamente. La última vez que vine aún estábamos juntos. Suspiro y dejo la foto en su lugar.
¿Por qué sigo fingiendo todo esto? No puedo más con este sentimiento.
Haré algo que he querido hacer hace un tiempo.
Me levanto del sillón. Tomo mi chaqueta y salgo de mi oficina, sin siquiera apagar las luces.