Llegamos a la camioneta y subimos mis maletas, luego de eso Jay subió al asiento del conductor y yo me fui en los asientos traseros con Lottie.
Al entrar habían dos pequeñas gemelas, que estaban muy entretenidas con un iPod, rápidamente voltearon y ambas se me quedaron viendo.
—¡Hola! ¿Tú eres Amber? —me preguntó una de las pequeñas mientras sonreía y mostraba la falta de algunos dientes.
—Hola, sí, soy yo, ¿cómo te llamas tú? —le sonreí mientras me ponía el cinturón de seguridad.
—Yo soy Phoebe, y ella es Daisy —apuntó a su gemela, que igual me sonreía mostrando la falta de algunos dientes de leche.
—¿Te quedas en nuestra casa? —preguntó la pequeña Daisy.
—Así es, ¿les molesta? –pregunté, y Lottie soltó una risita.
—Claro que no, será lindo y divertido, más mujeres en casa. —Phoebe soltó una risita mientras Daisy sonreía, será un poco difícil distinguir cuál es Daisy y cuál Phoebe.
—Oh claro, ¿sólo son ustedes tres?
—No, falta mi otra hermana y también mi hermano, que es el mayor de todos. —Me dijo Lottie mientras seleccionaba una canción en la camioneta.
—No sabía de ellos –dije, y una de las gemelas tomó mi mano para comenzar a jugar con mis uñas.
—Los conocerás en poco —me sonrió y la música empezó mientras nos adentrábamos en el tráfico.
Iba viendo detenidamente todo por la ventana, las calles, los parques, los edificios e incluso las casas, que eran hermosas. En la camioneta sonaba Feel So Close de Calvin Harris, iba cantando con Lottie e incluso las gemelas cantaban algunas partes que se sabían.
Llegamos a donde seguramente era la casa de Lottie, que quedaba un poco lejos del aeropuerto. Un portón blanco se abrió y Jay siguió conduciendo por el pavimento.
A lo lejos veía algunos árboles grandes y bien cuidados y más adelante pude distinguir una casa, que era de tonos blancos y beige con muchos ventanales grandes. ¡Qué casa!
Jay estacionó frente a la puerta de la casa y nos bajamos, rápidamente bajé mis maletas y después de eso entramos a la casa. Era todo realmente hermoso, la decoración era muy moderna pero aún así se sentía como una casa hogareña, muy acogedora.
—Bien niñas, yo tengo que arreglarme ya que tengo una junta en una hora. Amber, esta es tu casa —Jay me sonrió, luego de eso dejó las llaves de la camioneta en una mesa de cristal y subió las grandes escaleras.
Las gemelas salieron al jardín a jugar un rato en los columpios, mientras que Lottie me enseñaba la casa. La sala era un tanto grande con una gran pantalla plasma y pude distinguir un XBOX, seguramente era del hermano de Lottie.
Pasamos a la cocina que era realmente linda, los taburetes eran de una madera clara, e incluso había una barra de desayuno de la misma madera, con luces colgando de arriba y unos bancos a juego. En una de las paredes se encontraban dos puertas de madera, que seguramente era la alacena.
Pasamos al comedor y era igual de lindo y grande que todo en esta casa, habían ocho sillas en total y colgaban unas hermosas y llamativas lámparas del techo, habían varios cuadros grandes y algunos floreros grandes.
Subimos a donde sería mi habitación y caminamos por un largo pasillo, con grandes ventanas que hacían que entrara demasiada luz. Mi habitación se encontraba casi al final del pasillo, y había otra casi frente a la mía pero estaba un poco oculta por una pared.
Entré y Lottie entró justo detrás mío, la habitación tenía las paredes blancas con algunos detalles rojos. Había una ventana grande que llegaba casi desde el piso hasta el techo, con cortinas que caían suavemente por el suelo color rojo con azul marino.
Habían grandes puertas que eran para un armario, este armario es más grande que mi baño en casa. Tenía también un lindo espejo con marcos de madera. Frente a la cama matrimonial se encontraba un escritorio y junto un librero.
Habían lámparas en el techo e incluso en las paredes, muy bien decorado.
—Yo iré a ordenar mi habitación, y luego de eso podemos hacer algo, salir por un helado o ir a caminar —Lottie me sonreía desde el marco de mi puerta.
—De acuerdo, me parece bien, y gracias de nuevo por dejarme quedar aquí. —Le sonreí tímida mientras me encogía de hombros. Seguramente se gastó más dinero en esta habitación que en el coche de mis padres.
Después de desempacar mi ropa y darme una ducha en el baño, me dirigí a mi habitación y una pequeña brisa empezó a sonar, marqué a mis papás mientras veía por la grande ventana la suave lluvia.
Salí de mi habitación y caminé tranquilamente hacia la de Lottie.
—Creo que algo nos arruinó los planes. —Dije desde la puerta.
—Eso veo…casi siempre es así. Podemos ver películas si te parece. —Me dijo mientras guardaba una prenda en su armario.
—Estaría perfecto.
Bajamos a la cocina y preparamos unas palomitas y unos vasos de refresco, después de eso fuimos a la sala y empezamos a ver las películas que habían, y las gemelas llegaron corriendo con nosotras.
Empezamos a ver tranquilamente The Last Song, esta película siempre me hace llorar. Sería una linda tarde.
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drugslz
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I can love you more than this
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