Mi Alpha, Mi Hombre

21.

Paige

Y aquí estaba yo, Sentada en la mesa de mi pequeño apartamento. Presenciando la mejor creación del hombre, lo más rico y delicioso que puede existir, frente a mí hay una Pizza de 10 pedazos doble queso con hongos y él refrescos más grande que he visto.

Voy a tomar el primer pedazo pero me detengo al pensar que quizás esto no es mío, quizás esto es de otra persona y yo estoy pensando en comerlo, Pero...si está en mi mesa, en mi apartamento se supone que es mío así que lo comeré sin remordimiento alguno.

Tomo el primer pedazo entre mis manos para dirigirlo a mí boca. ¡Oh Por Dios! Huele tan bien...Estaba a punto de encajar mis dientes en el delicioso pedazo de pizza que tengo en frente de mi cuando.

-¿Qué demonios es eso?- digo en voz alta. Al sentir un cosquilleo extraño en mis orejas; llevo mi mano derecha a mi oreja en busca de qué demonios tengo ahí dentro pero no encuentro nada aún.

Intento llevar el pedazo de pizza que desde hace rato estoy velando, pero cuando intento hacerlo de nuevo ¡Bum! Siento de nuevo el mismo cosquilleo pero en mi nariz ¿Que demonios pasa? Sobo mi nariz perpleja por la sensación que comienza a pasarme por los ojos.

Estoy tan concentrada tratando de descubrir que es lo qué pasa que no me doy cuenta cuando la mesa que hace un minuto estaba enfrente de mi desaparece y con ella mi tan deseada pizza lo que me hace enfurecer. Una luz enceguecedora arroya mis ojos pongo una de mis manos en mi frente, achico los ojos intentando ver algo pero no lo hago. De pronto...despierto.

Demonios ¿Todo era un sueño? Era demasiado bueno para ser real...Abro los ojos y pestañeo varias veces para acostumbrarme a la luz; siento que el mismo cosquilleo que hace unos minutos sentí se reanuda en mi nariz nuevamente.

Siento algo duro detrás de mi, llevo mis manos a el y puedo sentir el torso de alguien porque una almohada no puede ser. Siguen las cosquillas a mí rostro, llevo mi mano hacia lo que sea que esté en mi cara molestando mi sagrado sueño.

Manoteo levemente lo que está despertándome - ¡Déjame dormir!- le ruego acurrucándome aún más a lo que sea que está en mi espalda.

Escucho una persona reír silenciosamente. Vuelven de nuevo a joderme la cara y pues mi paciencia se a agotado, comienzo a manotear lo que sea detrás de mi, aumentó la fuerza de las manotadas hasta que siento y escucho como abofeteo a alguien.

- ¡Auuuuu!- dice. Abro los ojos rápidamente y lo primero que veo es a Aáron sobándose la cara.

Me hace tanta gracia verlo así. comienzo a reír como maniática y el solo me mira furioso - ¿Por qué me pegas?- dice fulminandome.

- Interrumpiste un hermoso sueño- pone esa mirada Perver que ya siento que conozco de toda la vida.

- ¿Ah si? ¿Qué soñabas?- dice el en un tono sensual, subiéndose sobre mí. Sé que es un celoso de primera y puedo quitarle esa carita de perversidad en un segundo con lo que tengo en mente.

- Que me follaba a Chris Evans- le digo con la sonrisa más grande que he tenido jamás. Debería de estar de mal humor por lo que hizo pero al verlo todo pasó; ahora solo quiero molestarlo.

Siento como su cuerpo se tensa al decir eso, lo miro a los ojos pero lo que encuentro son dos retinas totalmente rojas. No me dan miedo, me dijo que no me haría daño y por alguna extraña razón confió en el. Cierra los ojos e Inhala y exhala tratando de calmarse.
-Amanecí de muy buen humor para que me arruines el día con estas bromas de mal gusto. - suspira. -El único- me da un beso - Que puede - me besa en el cuello - Tocar- me descubre el cuerpo quitando las sabanas - Este cuerpo- besa cada uno de mis senos -Soy yo-  recorre mi abdomen con sus labios deteniéndose en mi pelvis. Me mirándome a los ojos besa mis muslos - ¿Me entiendes?- dice con esa voz tan sensual que me encanta, y yo pues claro que lo entiendo.