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Paige

-Bruno, podrías sostener a nuestra hija por unos segundos mientras voy al baño.- le pido mientras doy saltitos.

Está acostado en la cama,mientras doy vueltas por todo el lugar con la niña que dicho sea de paso no tiene ningún tipo de plan para dormirse. Al contrario de eso, está muy despierta y con deseos de observar absolutamente, pero no quiere que la tienda sobre la cama.

-Bruno- Lo llamo al ver que me ignora.

-¡Está bien, pásamela!- dice sentándose en la cama.
Creo que es la primera vez que la va a cargar, aunque sea por solo unos minutos creo que me da emoción.

Intento pasarle la Bebé con extremo cuidado para no dejarla caer. Cuando al fin está en sus brazos notó como la niña a enredado sus dedos de mi cabello, jalándolo con fuerza.

-¡Ahh! Arantxa.- digo cuando cierro el molesto jalón de cabello.

Escucho a Bruno reírse de mi odisea.
-Te ayudo- dice intentando lograr que Arantxa suelte mi cabello.

Cuando al fin lo logra, siento como mi corazón lo hincha al ver al padre mi hija con ella en brazos, pero mi alegría dura poco.
La niña comienza a llorar entre sus brazos, de pronto, sin avisos.
¿lloras con tu papá pero con un desconocido Te ríes? Hija eres rara.

Veo la cara de pánico de Bruno al ver como la niña comienza ponerse roja, como siempre lo hace cuando empieza a llorar.

-Paige.- dice lentamente.

-Solo unos segundos Bruno, déjame ir al baño.- ruego mientras doy la vuelta para ir al baño.

Estas son las consecuencias de tomar solamente agua durante todo el día. Ha hecho un calor de mierda y por más agua que agua que tome no se me quita la sed.
Voy corriendo hasta el baño y hago todo lo que tengo que hacer prácticamente en fracciones de segundo, que me siguen pareciendo eternos.

Lavo mis manos para luego secarlas, salgo del baño ubicando a Bruno en el dormitorio. Da vueltas por todo el dormitorio, intentando calmar a la niña quien grita histérica entre sus brazos.

-Amor pero y ¿por qué lloras?- digo acercándome hasta ellos.

La niña no quiere a su papá.

Bruno no pierde tiempo y me la pasa con desesperación, como si le pesara. Si fuera la misma mujer de hace 1 mes hubiera  dicho que me duele que sea así pero ahora ya no me lo encuentro raro. Ya entendí que con Bruno no se puede; todo es cuando él quiere, no cuando los demás quieren.

Cuando me la pasa.

De pronto suena su celular.

-Si- dice al descolgarlo. - ¿QUÉ? PERO COMO COÑO SUCEDIÓ ESO.- grita espantándonos.

Me muevo del lugar donde estaba para ir a sentarme a la cama junto con la Ni; a, que desde que está en mis brazos está más calmada pero la que empieza a asustarse soy yo cuando escucho a respiración de Bruno acelerarse.

-¡QUIERO QUE LO BUSQUEN POR TODO EL MALDITO LUGAR!- Ordena furioso. -NO ME IMPORTA QUE YA LO HAYAN BUSCADO...-Lo miro - IRÉ CON MARK PARA ALLÁ, LO MEJOR QUE HACEN ES BUSCALO ¡MALDICIÓN! CON EL SUELTO, TODO SE VIENE ABAJO- de pronto empieza a temblar como. -¡NO TE IMPORTA! PONTE A BUSCARLO.- cuelga el teléfono y comienza a dar vueltas en la habitación, como loco.

-¿Pasa algo?- pregunto preocupada por mi mate.

Dejo la niña sobre la cama y me acerco a él, espero su respuesta pacientemente. Veo como teclea su celular a toda velocidad; esta todo nervioso, eso significa que algo no anda bien.
-Bruno- Lo llamo cuando estoy frente a él.

Mi Alpha, Mi HombreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora