Wʜᴇʀᴇ Wᴇ Aʀᴇ Tᴏᴜʀ || Z.M

Capítulo 27.

{CAROLINA’S POV}

La primera orden que recibimos con Benja al entrar a la celebración, fue tomar asiento en la misma mesa que Karim y la pareja de esta, por desgracia.

Aunque parezca extraño, la chica se comportó de manera… ¿Linda? Y jamás intentó jugar conmigo ni decirme algo antipático.

Era muy, muy extraño.

—La primera chica en presentarte ante ustedes, nuestros invitados, es Carolina García —Anunció de pronto la profesora Prado, quien habló en un perfecto inglés británico.

Estaba realmente nerviosa, el poderoso discurso que había practicado durante semanas se había ido a la basura, y no podía recordar nada de nada.

Esto estaba realmente mal, si me ponía a improvisar, es más que seguro que los señores lo notarían, por lo que tenía que pensar en una solución en… dos segundos.

Caminé desde mi mesa de la cena hasta el escenario, con una sonrisa en el rostro, para tratar de aparentar que tenía toda la confianza del mundo.

Miré a los señores mientras tomaba el micrófono entre mis manos y les sonreí.

Ellos escribieron una nota en unos papeles. O al menos eso logré ver yo.

—Como ha dicho mi maestra hace unos minutos, mi nombre es Carolina García —Dije en inglés. Noté que uno de los señores sonreía en mi dirección, eso me hizo sentir más confiada—. Tengo diecisiete años y soy puramente de este país. La verdad es que yo tenía un discurso preparado, pero mis nervios me han traicionado y lo he olvidado —Me encogí de hombros mientras la audiencia reía—. Así que creo que improvisaré… Yo comencé a demostrar un gusto más allá de lo normal por el idioma anglo desde que escuché por primera vez una canción de Hannah Montana —Me quedé en silencio mirándolos a todos—. La chica con peluca rubia de Disney, ¿Sí? ¿No? —Ellos me miraron  sonriendo y negando con la cabeza—. Bueno, ese fue el primer atisbo de lo que luego pasaría a mayores… cuando fui creciendo, ese gusto se intensificó, pero el punto culmine lo alcancé al conocer a la banda inglesa—irlandesa One Direction… Aunque suene absurdo, ellos en gran parte me han motivado a practicar más este idioma extranjero —Me quedé en silencio, observando el suelo—. Tenía la mínima esperanza que al aprender inglés iba a poder conocerlos y se iban a casar conmigo —Solté de pronto y todo el mundo comenzó a reír, descontroladamente. Yo estaba hablando algo en serio—. ¡Es cierto! Y bueno, inconscientemente pasé de ser una chica con un nivel básico en inglés a dominarlo bien, gracias a mamá que me hizo ser parte de un instituto del idioma anglo —Me encogí de hombros.

Dije algunas palabras más y sentía que tenía a los jueces en la palma de mi mano.

No quería sonar egocéntrica, pero estaba segura que mi improvisado discurso acerca de cómo comencé con el gusto del inglés había gustado a todos. Incluida a mi peor enemiga Karim, quien aplaudía fuertemente cuando había terminado.

La noche siguió su curso normal, luego fue el turno de los demás alumnos para presentarse ante los señores ingleses, recuerdo que el discurso de Karim también tuvo una excelente acogida, incluso llegué a pensar que había sido más elaborado que el mío.

Luego fue el turno de Jenny, después de Benjamín y así siguieron todos…

De un momento a otro, Benjamín me pidió que lo acompañase a la terraza de nuestro colegio porque según Él, se sentía algo acalorado y la presión le estaba subiendo.