Wʜᴇʀᴇ Wᴇ Aʀᴇ Tᴏᴜʀ || Z.M

Capítulo 48.

{RYAN’S POV}

Luego de mi estúpido comentario en la Universidad de Lancaster, y de que le dieran a las chicas varias indicaciones más acerca de lo que se encontrarían, de la malla curricular que debían seguir, de los horarios de las comidas o el estricto rigor que se aplicaba al meterse en problemas, pudimos volver al fin al hotel en que nos estábamos quedando.

Sentí la mirada firme de Sara en mi rostro y era más que deducible decir que estaba realmente jodida con mi comportamiento poco profesional, pero bueno, ¿Qué es lo que hace un hombre cuando ve que están tratando de aprovecharse de la mujer que creemos que es nuestra? Actuar sin pensar, eso es.

Sé que debería estar pensando en las explicaciones que le tendría que dar a mi colega, pero en realidad, no sabía qué decirle.

El auto finalmente aparcó fuera del hotel, y gracias a Dios, Karim y Carolina subieron antes que nosotros dos. No quería tener que dar explicaciones frente a ella, porque sería… extraño.

Sara me hizo un gesto para que fuésemos al café que estaba en el vestíbulo, y sin más que decir, la acompañé.

—Bueno… habla —Dijo ella, mirando despectivamente el menú del local.

—¿Qué debería decir? —Pregunté. Encontraba algo estúpido tener que darle explicaciones a ella.

—Ryan, estamos hablando de que tienes un amorío con una de tus alumnas, que yo sepa, eso no está bien visto por la ley —Dijo ella, dejando la carta en la mesa.

—¿Y por qué te importa tanto? —Pregunté, alzando las cejas. Ella carraspeó levemente con su garganta y no dijo nada—. Vale, vale… te diré.

—Te escucho…

Y bueno, no me quedó más remedio que contarle toda la verdad, desde que la conocí mucho antes de entrar a trabajar en la escuela y la manera en que me cautivó a primera vista.

Eso fue algo que me prometí no contarle a nadie, pero simplemente se me salió.

Sé que Sara no estaba del todo contenta con mi historia, ¿Pero qué podía hacer yo? Ella fue quien quiso saber.

—Entonces, ¿Estás enamorado de ella? —Preguntó algo bajito, con su mandíbula tensa.

—No sé si enamorado, pero me gusta mucho —Admití, mirando el azúcar—. Y mañana, la invitaré a recorrer Lancaster.

—¿En serio? —Preguntó con cierto temor.

—Claro.

 

{CAROLINA’S POV}

El día de ayer había pasado sumamente rápido.

Luego de llegar de la visita a la Universidad de Lancaster, con Karim decidimos seguir hablando del tema de Ryan y lo anonadada que había dejado a la Profesora Prado.

Karim tenía la conclusión de que ella lo amaba en secreto, pero como era tan vieja, no podía tener sexo con Él. Claramente yo le pegué, porque eso había sido asqueroso… Es decir, es como imaginarse a…. ¡No, totalmente asqueroso!

Toda la tarde la pasamos conversando acerca de anécdotas graciosas y viendo películas, hasta que llegó la noche y me acordé de todas mis amigas, con quienes no había podido conversar desde hace días.