Kate lo esperaba. Habían comido tranquilamente. Y ahora estaba allí, en su salita. Rozando sus manos por todos aquellos pétalos que Richard había esparcido por la estancia. Fue incapaz de apartar de su rostro una sonrisa de enamorada al ver todo lo que era capaz de hacer por ella. El fuego dio un pequeño chasquido. Se sobresaltó.
- ¿Concentrada? - sonrió Richard desde el marco de la puerta.
- Esperándote. - le devolvió la sonrisa.
- Me alegra saberlo porque no pienso despegarme de ti. - le guiñó un ojo y volvió la puerta el entrar. Tuvo que utilizar una de sus piernas ya que en ambas manos llevaba una copa de vino.
- ¿Es el que me gusta?
- Efectivamente, inspectora.
- ¿Quieres emborracharme?
- Para nada... - le lanzó una sonrisa provocativa.
- No sé si creerte...
- Debería hacerlo, inspectora. - le dio una de las copas y se sentó a su lado, en el suelo. Kate se apoyó en él, buscando su abrazo. - Creo que podría estar así eternamente.
- Hmmm...
- Voy a tener que regalarles un viaje o algo a tu padre y a mi madre por dejarnos estas horas a solas.
- Si te digo una cosa, ¿no te enfadas?
- Creo que no lo haré... - sonrió, besando su cabeza.
- Echo de menos a Alexis. - lo abrazó.
- Yo también, mi vida. Pero necesitábamos estar a solas. - reconoció.
- Lo sé. Hoy y mañana no lo cambio por nada en el mundo. Tener este tiempo para hablar a solas es perfecto Rick. - alzó su rostro y dejó un beso en su mejilla.
- Aunque el que más se está desnudando soy yo...
- Hoy te toca a ti... mañana puede que me toque a mí...
- ¿Puede?
- Hmmm...
- Ahí no veo mucha seguridad...
- Nunca se sabe cómo puede darse el día, es mejor no hacer planes. - intentó picarle.
- Ya veo lo que pretendes... - comenzó a hacerle cosquillas.
- ¡Rick! ¡Para! ¡Para!
- ¿Me contarás algún secretillo mañana? - sin soltarla.
- ¡Lo prometo! - riendo sin parar.
- Me encanta hacer planes contigo... - la abrazó.
- Menudo morro tienes... - lo abrazó con fuerza, escondiendo su rostro en su cuello y aspirando su aroma - ¿Cuándo te diste cuenta de que tu abuelo comenzaba a tener lagunas?
- ¿Cómo sabes que yo fui el primero?
- Eras quien pasaba más horas con él.
- Probablemente tengas razón. - se quedó abrazado a ella y cubrió parte de sus cuerpos con una manta.
- Gracias... - se acomodó más a él.
- Una de las tardes que lo acompañé al trabajo, comenzó a arreglar una de las piezas del motor. Me dijo que permaneciese atento a sus peticiones. Él me indicaría que botones tocar y yo solo tendría que pulsar, mover algo más y ver si estaba dando resultado su toque maestro. - Richard se estremeció un poco. Kate notó ese pequeño tembleque de su cuerpo. Lo apretó contra ella. - A los 20 minutos de estar allí, de pronto, subió a comprobar algo y se sorprendió al verme. Me preguntó qué hacía allí. Noté que se bloqueó al ver mi rostro de susto. Intentó hacerme creer que había sido una broma. Pero supe que no. Hablé con mi madre. No le dio importancia. Y yo comencé a estar más atento.
![](https://img.wattpad.com/cover/95551097-288-k702236.jpg)
ESTÁS LEYENDO
La sonrisa de su mirada
FanfictionRichard Castle la recuerda. Como si fuese ayer. Como si el tiempo no hubiese pasado. Y es que ella llegó a su vida de pronto, justo cuando más necesitaba una mano amiga, una mano a la que aferrarse y no saltar al vacío. Y cuando el destino vuelve a...