4. DETECTIVES: ENCRUCIJADA

35. RIESGO INNECESARIO

Eso iba en serio, lo supo desde el momento en que Steve intercambio las primeras palabras con el panel de naciones unidas.

El rubio escuchaba las amenazas, las palabras de odio, incluso de lastima hacía él. Había quienes se tomaban la molestia de ser diplomáticos y expresar sus opiniones de manera respetuosa, pero había quienes no podía reprimir su odio y molestia contra el ex capitán américa.

Steve no dijo nada mientras hablaban, esperando hasta tener una idea clara de lo que opinaban: en realidad ellos no harían nada.

-entiendo-pronuncio con voz clara y fuerte, interrumpiéndolos-solo intentan proteger sus naciones-dijo-proteger a sus ciudadanos y sus intereses, está bien-

-señor Rogers, creo que no nos ha entendido...-

-lo entiendo muy bien, no tengo nada en contra de eso-continuo hablando, pero ahora endureciendo más su gesto y su voz-nosotros debemos hacer frente y pagar por nuestros errores ¿no es así?-hizo una pausa, esperando por una respuesta que jamás llego-lo que no entiendo es porque deciden hacer caso omiso cuando un hombre peligroso que puede acabar con toda una nación aparece-

-el hombre va tras Tony Stark, algo debió haber hecho ¿no se ha puesto a pensarlo? Ese hombre le vendía armas a grupos terroristas ¿Quién nos asegura que en realidad su secuestro no tuvo que ver con algún cliente insatisfecho?-

-siempre que hubo algún peligro que los acechara, nosotros estuvimos ahí tratando de ayudar, Tony estuvo ahí y debo recordarles que si no fuera por él, Manhattan ahora sería un enorme crater-

-Señor Rogers-llamó una mujer -debe entender que el apoyo que pide no le puede ser dado, sus errores y los del señor Stark los dejaron en este punto, no nosotros-

-¿y qué hay de sus errores?-les pregunto Steve-¿hasta dónde los llevaran si se niegan a aceptarlos?-

-¿acaso intenta amenazarlos?-pregunto otro de los hombres, con clara molestia.

Steve no intento desmentirlo, solo guardando silencio mientras colgaba. A puertas cerradas, no conseguiría nada del gobierno, pero sabía cómo hacerlos recapacitar.

-ahora estamos con el ex capitán américa, Steve Rogers, señor ¿no le parece un poco fuera de lugar reclamar nuestra tención después de lo que ha ocurrido?-le pregunto la reportera, quien lo escuchaba desde el estudio.

-no lo haría a menos que no fuera necesario-

-en base a los anteriores sucesos, usted debería estar en una cárcel de máxima seguridad...-

-esto no es para hablar de mi-la interrumpió Steve-ni tampoco para tratar de limpiar mi nombre-

-¿entonces de que desea hablar?-pregunto el hombre que acompañaba a la reportera-la situación que se está viviendo no tiene una finalidad política ni se trata de un supervillano...-

-no, se trata de algo aún más peligroso, se trata de algo social-empezó a hablar Steve-Isaac Burrell se encargó de que así fuera y sé que saben de quien hablo, han hecho un gran uso del material enviado por él, sin preocuparles las consecuencias de ello-

-¿a que desea llegar? Creo que al mundo entero le encantara escuchar las razones que ahora guían los actos de quien les dio la espalda por un asesino y agente de hydra ¿es acaso la culpa de saber que entre las víctimas de James Buchanan Barnes se encuentra Howard y María Stark?-

-ese es un asunto que no me compete hablar con ustedes-respondió el rubio con tranquilidad, muy diferente de como en realidad se sentía por dentro, sabiendo lo que estaba provocando-sé que culpan a Tony de todo lo que ha pasado, lo culpan de las explosiones, lo culpan de los ataques y de los videos, no puedo hacerlos reflexionar, sé que al menos en esto no puedo, no así-